Presidente del TSE pide apoyo ciudadano y garantiza elecciones del 17 de agosto
Óscar Hassenteufel asegura que el sistema electoral boliviano «es lento pero seguro». El titular del Tribunal Supremo Electoral (TSE) respondió a críticas y desmintió mitos sobre el proceso electoral durante una entrevista en Santa Cruz. Reafirmó la autonomía del órgano pese a presiones políticas.
«El Tribunal está acosado, pero las elecciones están garantizadas»
Hassenteufel, de 80 años, admitió que el TSE recibe ataques «de todos lados» por sus decisiones, pero insistió en que «la independencia se prueba cada día». Aseguró que el sistema de conteo manual y las actas públicas garantizan transparencia, aunque reconoció debilidades en los partidos políticos: «El 36% de inhabilitaciones refleja su falta de consenso».
Desafíos operativos
El TSE enfrenta problemas logísticos, como la falta de divisas para pagar empadronadores en el exterior, pero avanza con simulacros del sistema de transmisión rápida (TREP). El 6 de julio realizarán un ensayo con 9.000 mesas. Hassenteufel confirmó que observadores internacionales (OEA, UE y Uniore) ya fueron invitados.
Un árbitro en la mira
El presidente del TSE negó que el Tribunal Constitucional (TCP) los bloquee: «Hubo acuerdos verbales para priorizar temas electorales». Sin embargo, admitió que «el TCP quizás se volvió un ente demasiado poderoso». Sobre la candidatura de Evo Morales, se abstuvo de opinar para no prejuzgar.
De La Paz a Santa Cruz: transparencia sobre ruedas
El traslado temporal de sesiones a Santa Cruz busca «estar cerca de la población», aunque Hassenteufel aclaró que «el centro operativo sigue en La Paz». Destacó avances como la digitalización del registro civil y la publicación de actas electorales en línea desde 2002.
Un sistema con décadas de historia
Bolivia mantiene desde 2002 un modelo electoral basado en sorteo de jurados, voto secreto y conteo manual con doble verificación. El TREP, implementado posteriormente, solo ofrece resultados preliminares no vinculantes. Las tensiones actuales reflejan la polarización política acumulada en ciclos electorales anteriores.
Hacia las urnas con un mensaje claro
Hassenteufel cerró con un llamado a «confiar en el TSE y participar», recordando que «el voto decide». Su gestión terminará el 19 de diciembre, tras asegurar las elecciones de agosto y sentar bases para los comicios subnacionales de 2026.