El conflicto entre Musk y Trump amenaza los negocios del magnate
La ruptura entre ambos pone en riesgo contratos millonarios y políticas clave. La disputa afecta desde subsidios hasta regulaciones de empresas como Tesla, SpaceX y X, con repercusiones en tecnología, espacio y criptomonedas.
«Una ópera empresarial con alto costo político»
El enfrentamiento entre Elon Musk y Donald Trump ha eliminado miles de millones del valor de Tesla y amenaza contratos gubernamentales clave. «La velocidad y ferocidad de esta ruptura es asombrosa», dijo Steve Sosnick, estratega de Interactive Brokers. Las agencias federales podrían ahora endurecer su postura hacia las empresas de Musk, desde SpaceX hasta Neuralink.
Riesgos para Tesla
La NHTSA (seguridad vial) investiga fallos en el «Autopilot» de Tesla, y la eliminación de créditos fiscales para vehículos eléctricos en el megaproyecto republicano afectaría sus ventas. Musk defiende los incentivos, aunque alega que su crítica al proyecto se debe al aumento de la deuda nacional.
SpaceX en la mira
Trump amenazó con recortar los $20.900 millones en contratos estatales de SpaceX, vital para la NASA y el Pentágono. Musk contraatacó sugiriendo desmantelar la nave Dragon, lo que obligaría a EE.UU. a depender de cohetes rusos. SpaceX también aspiraba a contratos del sistema de defensa «Golden Dome».
Starlink y los subsidios
La subsidiaria de SpaceX busca $42.450 millones en subsidios para internet rural y un rol en la modernización del control aéreo. Aunque el secretario de Transporte, Sean Duffy, se declaró «agnóstico» sobre su participación, la FAA aún no ha asignado contratos clave a Starlink.
Antecedentes: De aliados a enemigos
Musk fue asesor de Trump en el Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE) durante 130 días, lo que benefició a sus empresas. Tras su salida, seguidores suyos permanecieron en agencias clave. La ruptura comenzó cuando Musk criticó el proyecto de ley republicano, generando represalias públicas de Trump.
Consecuencias en juego
El conflicto podría retrasar misiones espaciales, endurecer regulaciones a Tesla o limitar subsidios a Starlink. Mientras Neuralink y xAI enfrentan revisiones de la FDA y la EPA, X lidia con investigaciones de la FTC. El desenlace dependerá de si la administración Trump decide usar su poder regulatorio contra Musk.