Pacientes renales inician huelga de hambre por deudas en diálisis
Más de 2.000 afectados exigen pagos atrasados del SUS. Cinco manifestantes protestan en la plaza 24 de Septiembre de Santa Cruz. El Ministerio de Salud adeuda desde seis meses a un año y medio a clínicas privadas y hospitales públicos.
«Sin diálisis, nuestra vida está en riesgo»
Los pacientes renales iniciaron la medida ante la falta de respuesta gubernamental. Según los manifestantes, 1.700 personas reciben tratamiento en clínicas privadas, mientras que 300 lo hacen en hospitales públicos. «Temen que se suspenda el servicio por las deudas», explicó uno de los afectados.
Deudas que ponen en peligro vidas
El Sistema Único de Salud (SUS) debe un año y medio de pagos a hospitales de segundo nivel (desde inicios de 2024) y seis meses a clínicas privadas (desde diciembre de 2024). Los pacientes denuncian que esta situación amenaza la continuidad de un tratamiento vital.
Un grito desde la plaza 24 de Septiembre
La protesta se concentra en el corazón de Santa Cruz, con cinco huelguistas en piquete permanente. La movilización busca presionar al Gobierno nacional para que regularice los pagos y garantice el acceso a la diálisis.
Antecedentes: Un sistema en crisis
El SUS enfrenta denuncias recurrentes por retrasos en pagos a proveedores de salud. En 2024, pacientes renales ya habían alertado sobre demoras en coberturas, pero esta es la primera vez que recurren a una huelga de hambre.
La salud no puede esperar
La medida evidencia la vulnerabilidad de pacientes crónicos ante fallos administrativos. Su demanda prioritaria es garantizar el financiamiento inmediato para evitar interrupciones en un tratamiento del que dependen diariamente.