Starmer apunta a Farage como su principal rival político

El líder laborista Keir Starmer identifica a Nigel Farage como su principal competidor en las próximas elecciones británicas, marcando una batalla ideológica por el electorado.
POLITICO

Starmer apunta a Farage como su principal rival político en Reino Unido

El líder laborista busca construir una coalición anti-Farage ante el ascenso de Reform UK. La estrategia se centra en desacreditar al populista, pero las encuestas muestran que su popularidad crece. El enfrentamiento define la batalla por el electorado británico.

«Una batalla por el alma de Reino Unido»

Keir Starmer, primer ministro laborista, ha declarado a Nigel Farage, líder de Reform UK, su principal competidor para las próximas elecciones. En un discurso en una fábrica de vidrio en St Helens, Starmer lo tachó de «falso amigo de la clase trabajadora», contrastando su origen humilde con la educación privilegiada de Farage. «¿Pueden confiar en él con sus empleos, hipotecas o pensiones?», preguntó.

La estrategia de Starmer

El laborista intenta vincular a Farage con el polémico «minipresupuesto» de Liz Truss, que hundió la credibilidad económica de los conservadores. Un alto funcionario gubernamental afirmó que «Farage es tóxico para muchos votantes», pero las encuestas revelan que su imagen se está «desintoxicando». Según Merlin Strategy, Farage supera a Starmer en atributos como «valentía» o «defensa de los trabajadores».

La respuesta de Reform UK

Farage ha moderado su discurso, adoptando medidas tradicionalmente de izquierda, como nacionalizaciones y protección social. Un aliado suyo criticó la estrategia laborista: «El público prefiere votar por algo positivo, no contra un supuesto negativo».

El riesgo de la polarización

Starmer enfrenta presiones internas por su giro hacia políticas restrictivas en inmigración y recortes sociales, que han enfurecido a su base progresista. Aunque intenta equilibrar su discurso, su popularidad cayó a -46%, mientras que Farage sube a -27%. Un diputado laborista comparó la situación con 2017, cuando los votantes optaron por «lo menos aterrador».

Cuando el miedo no basta

En 2016, el «Proyecto Miedo» pro-UE fracasó ante el Brexit. Ahora, Labour confía en que Farage no convencerá como primer ministro: «El 44% prefiere a Starmer frente al 29%», según YouGov. Pero analistas advierten: «El miedo no siempre gana».

El cierre: ¿quién define el futuro británico?

La batalla entre Starmer y Farage refleja una lucha ideológica más amplia. Mientras el laborista intenta consolidarse como «baluarte contra la extrema derecha», Reform UK gana terreno. El resultado dependerá de si los votantes priorizan estabilidad o cambio radical.