Meta y Anduril desarrollan cascos de realidad mixta para el ejército de EE.UU.
El contrato militar asciende a 22.000 millones de dólares. Ambas empresas colaborarán en dispositivos XR para soldados, combinando tecnología de Meta y software de Anduril. El anuncio se produjo este jueves 29 de mayo.
«Tecnomantes en el campo de batalla»
El proyecto nace del programa SBMC Next, antes llamado IVAS Next, que originalmente fue adjudicado a Microsoft en 2018. Tras problemas técnicos, el Ejército estadounidense transfirió la gestión a Anduril en febrero, manteniendo a Microsoft como proveedor de servicios en la nube. La meta es crear múltiples proveedores de dispositivos de realidad mixta para uso militar.
Reconciliación entre Luckey y Meta
Palmer Luckey, cofundador de Anduril y creador de Oculus VR, declaró: «Me alegra trabajar con Meta nuevamente». Luckey fue despedido de Facebook (ahora Meta) en 2017 tras apoyar públicamente a Donald Trump. Ahora, ambas compañías unen fuerzas: los dispositivos usarán el modelo de IA Llama de Meta y el software Lattice de Anduril.
EagleEye: el ecosistema militar
La familia de productos se llamará EagleEye, nombre que Luckey ya había planteado en sus primeros bocetos para Anduril. Según un portavoz, consistirá en un ecosistema de dispositivos que mostrarán inteligencia del campo de batalla en tiempo real. Luckey celebró en redes sociales esta colaboración, destacando que ahora tienen acceso a toda la tecnología desarrollada antes, durante y después de su etapa en Meta.
De HoloLens a la realidad aumentada bélica
El programa IVAS comenzó con Microsoft desarrollando gafas similares a HoloLens, pero los fallos técnicos llevaron al Ejército a buscar alternativas. Anduril asumió el liderazgo con un enfoque en software primero, aunque ahora retoma la idea original de Luckey: dispositivos XR para «convertir a los soldados en tecnomantes».
Una alianza con miras al futuro
Esta colaboración marca un hito en la tecnología militar, integrando inteligencia artificial, realidad extendida y sistemas de mando. El éxito del proyecto podría redefinir el equipamiento de las fuerzas armadas, aunque su implementación dependerá de los plazos y pruebas del contrato multimillonario.