Viceministro anuncia reforzamiento de controles en frontera con Perú
Autoridades bolivianas incautaron 1.100 quintales de alimentos en operativo contra el contrabando. El viceministro Luis Velásquez confirmó hostilidad de comunarios hacia periodistas y funcionarios en Desaguadero. Se desplegaron 1.480 militares para vigilancia permanente.
«La orilla del río ya está controlada»
El viceministro de Lucha Contra el Contrabando, Luis Velásquez, detalló que los operativos buscan frenar el «contrabando a la inversa», especialmente de productos de la canasta familiar hacia Perú. «Si visitan este sector, verán que no pasa producto boliviano al lado peruano», aseguró. Reconoció que los comunarios reaccionan con agresividad incluso al tomar fotografías.
Periodistas y funcionarios bajo amenaza
Un equipo de URGENTE.BO fue interceptado por 12 personas que les obligaron a borrar imágenes bajo amenazas físicas. Velásquez vivió una situación similar: «Un ciudadano me increpó por tomar fotos, pero tengo derecho como boliviano», relató. Pese a ello, insistió en que la zona está bajo vigilancia.
Nuevo golpe al contrabando
En las últimas horas se incautaron 750 quintales de maíz y 350 de azúcar. El viceministro advirtió que los militares tienen órdenes de detener a quienes se beneficien del contrabando, para llevarlos ante el Ministerio Público.
Una frontera bajo presión
Desaguadero, límite entre Bolivia y Perú, es un punto crítico por el tráfico ilegal de alimentos. Las autoridades bolivianas mantienen operativos desde 2024, pero enfrentan resistencia de actores locales vinculados al comercio ilícito.
El desafío de cerrar la ruta del contrabando
El reforzamiento militar busca cortar el flujo de productos básicos hacia Perú, aunque persisten tensiones con la población. La eficacia de los controles dependerá de la continuidad de los operativos y las sanciones judiciales.