Evistas intentan llegar al TSE en cuarto día de protestas electorales
La policía bloqueó el acceso al Tribunal Supremo Electoral (TSE). Seguidores de Evo Morales exigen su candidatura para agosto, pese a impedimentos legales. La marcha en La Paz derivó en enfrentamientos y acusaciones de «terrorismo de Estado».
«El pueblo no se calla»: tensión en las calles
Un contingente policial impidió este jueves que manifestantes evistas llegaran a la plaza Abaroa, sede del TSE. «Queremos pasar», «democracia sí, dictadura no», gritaron los protestantes, mientras la concejal Wilma Alanoca (aspirante a vicepresidenta) acusó al gobierno de «criminalizar la protesta». «Nos quieren eliminar de la papeleta electoral», denunció.
Enfrentamientos y gasificación
El miércoles, la tensión escaló cuando la marcha intentó ingresar a la plaza Murillo. La Policía respondió con gas lacrimógeno. Morales, refugiado en el Trópico, calificó las acciones como «abuso de poder» y acusó al gobierno de «reprimir para entregar el poder a la derecha».
Morales: «Está en juego el destino de la patria»
El expresidente, inhabilitado legalmente para candidatearse, llamó a la «unidad y movilización» en redes sociales. «No es por ambición, sino por el pueblo», afirmó. Sin embargo, no logró inscribir su candidatura en el TSE ni consiguió un partido habilitado.
Bloqueos y advertencias gubernamentales
Mientras, evistas bloquearon la ruta Cochabamba-Sucre «de manera indefinida». El presidente Luis Arce denunció que «malos bolivianos» buscan generar caos antes de los comicios.
Una crisis con raíces legales
Las protestas surgen tras la inhabilitación constitucional de Morales para postularse y la falta de aval partidario. En 2025, el TSE ratificó que no cumplió los requisitos legales, pese a su base de apoyo.
Elecciones bajo presión
El conflicto evidencia la polarización en Bolivia a tres meses de los comicios. La tensión entre movilización social y marco legal marca el escenario, con riesgo de más protestas.