Trump pospone nuevamente su decisión sobre Putin con el plazo de «dos semanas»
El presidente de EE.UU. repite la misma fórmula desde hace más de dos meses. Trump evita definir su postura frente al líder ruso mientras fracasan sus esfuerzos para negociar la paz en Ucrania. La Casa Blanca insiste en que espera avances en las conversaciones directas entre Kiev y Moscú.
«Lo sabrán en dos semanas»: un mantra sin respuesta
Donald Trump ha utilizado la misma evasiva en al menos cuatro ocasiones desde abril. El 28 de mayo, en la Oficina Oval, aseguró: «Les diré en unas dos semanas… veremos si [Putin] nos está engañando o no». Sin embargo, ya había dado plazos similares el 24 y 27 de abril, y el 19 de mayo, sin concretar acciones.
Frustración y estrategia de zanahoria
La portavoz Karoline Leavitt vinculó el último retraso a una posible reunión entre Ucrania y Rusia en Estambul. Trump ha optado por «un enfoque basado en incentivos» con Putin, incluyendo promesas de futuros acuerdos, mientras aumenta la presión sobre Zelenskyy. Hasta ahora, Rusia ha respondido intensificando los ataques.
La sombra de las sanciones
El presidente estadounidense evita aprobar un proyecto de sanciones secundarias respaldado por ambos partidos en el Senado. Temor al impacto en una eventual reconciliación con Moscú frena su decisión, según analistas.
Una promesa de campaña en standby
Trump llegó a la presidencia en 2024 prometiendo acabar rápidamente con la guerra en Ucrania. Su incapacidad para lograrlo contrasta con su retórica inicial. La Casa Blanca insiste en que las conversaciones bilaterales son clave, pero no ha conseguido que Rusia reduzca su ofensiva.
El reloj sigue corriendo
Más allá de los plazos autoimpuestos, Trump no ha definido una estrategia clara frente a Putin. La repetición de la fórmula «dos semanas» refleja su dificultad para equilibrar presiones internas y su deseo de un reinicio con Rusia, mientras el conflicto ucraniano entra en su cuarto año.