Diputado del MAS exige retirar a Del Castillo de candidatura presidencial
Rolando Cuéllar da plazo hasta el 6 de junio para modificar las listas del partido. El legislador denuncia imposición «a dedo» de candidatos y advierte con retirar apoyo a la campaña si no se atienden sus demandas. La crisis interna surge tras el congreso del MAS-IPSP que exigió decisiones «de abajo hacia arriba».
«El manotazo actual supera al dedazo de Evo Morales»
El diputado arcista acusó al gobierno de Luis Arce de controlar la dirección nacional del MAS-IPSP, ignorando acuerdos de bases partidarias. Señaló que la designación de Eduardo Del Castillo como candidato presidencial y de Martín La Mar como delegado político «no cuenta con respaldo de medio millón de militantes».
Críticas a las listas y alternativas propuestas
Cuéllar reveló que en las listas figuran «el chofer de la ministra de la Presidencia» y familiares de autoridades. En contraste, propuso nombres como Felipa Montenegro o Angélica Ponce, a quienes atribuyó «mérito, trayectoria y lealtad». El legislador también denunció que fue desplazado como precandidato a senador por Santa Cruz.
«Sin cambios, no habrá campaña»
El diputado fijó un ultimátum: exige la modificación total de las listas antes del 6 de junio, incluyendo al binomio presidencial (Del Castillo y Berna). De lo contrario, advirtió que sus bases «no harán campaña» y responsabilizó a los evistas por un eventual riesgo a la personería jurídica del partido.
Grietas en la casa del MAS
La tensión refleja disputas entre facciones del MAS-IPSP tras el congreso de octubre de 2024, donde se estableció que las decisiones debían surgir desde las bases. Sin embargo, Cuéllar afirma que ahora priman intereses del entorno gubernamental, generando una «crisis orgánica» en el partido.
El reloj corre para el oficialismo
La advertencia del diputado pone en evidencia divisiones que podrían afectar la unidad del MAS-IPSP de cara a las elecciones. El plazo del 6 de junio marca un punto de inflexión para resolver si prevalece la línea gubernamental o las demandas de sectores internos críticos.