FMI advierte que Bolivia necesita ajuste fiscal urgente para evitar crisis
El organismo proyecta inflación del 4.5% en 2024 y deuda pública en el 84% del PIB. Recomienda un ajuste gradual, devaluación inicial y recorte de subsidios para corregir desequilibrios macroeconómicos. El informe se conoce mientras el Gobierno analiza las propuestas.
«Un ajuste desordenado tendría fuertes consecuencias sociales»
El FMI alertó en su evaluación bajo el Artículo IV que «las políticas actuales son insostenibles». Señaló que el déficit fiscal se financia con reservas casi agotadas y que la deuda pública alcanza niveles críticos. «La tasa inflacionaria está contenida artificialmente por controles de precios», indicó el reporte.
Medidas clave propuestas
El organismo sugiere: eliminar subsidios a combustibles, reducir la nómina pública y reformar el sistema tributario. En lo cambiario, plantea «abandonar el tipo de cambio fijo» e implementar una devaluación inicial para aliviar presiones en el mercado paralelo.
Datos que pintan un panorama complejo
El informe detalla: déficit de cuenta corriente del 5% del PIB por menor exportación de gas y alta importación de combustibles. Las reservas internacionales están «casi agotadas», y el crecimiento económico muestra una marcada ralentización.
El litio no es la solución inmediata
Aunque reconoce el potencial estratégico de las reservas de litio, el FMI aclaró que «estos sectores tardarán en desarrollarse» y no resolverán los desequilibrios a corto plazo. El organismo insistió en que la transición requiere «un marco fiscal creíble y protección social reforzada».
¿Se puede evitar el colapso?
El FMI concluyó que «evitar un ajuste desordenado está aún al alcance», pero exigió voluntad política y comunicación transparente. El éxito dependerá de la implementación oportuna de reformas estructurales en un contexto de reservas críticas y presión inflacionaria.