Grandes tecnológicas apuestan por startups de energía nuclear para alimentar sus centros de datos
Amazon, Google, Meta y Microsoft financian o compran energía a reactores modulares innovadores. La demanda eléctrica de la IA impulsa el resurgir de la fisión nuclear con diseños más seguros y escalables. Cinco startups destacan en este nicho, según un reporte del 26 de mayo de 2025.
«Reactores a la carta para la era digital»
Las tecnológicas buscan fuentes estables y predecibles las 24 horas, clave para operar cargas computacionales intensivas. Los pequeños reactores modulares (SMR) prometen superar limitaciones de las centrales tradicionales, con diseños escalables y menor riesgo. Ningún SMR opera aún en EE.UU., pero los gigantes ya firman acuerdos de compra o invierten directamente.
Kairos Power: respaldo de Google y 629 millones públicos
Google acordó comprar 500 megavatios para 2035. Sus reactores usan sal fluorada fundida como refrigerante, eliminando la necesidad de alta presión. La startup recibió luz verde en 2024 para construir dos reactores de prueba en Tennessee (35 MW cada uno).
Oklo: el proyecto de Sam Altman con obstáculos regulatorios
Respaldada por el CEO de OpenAI hasta abril de 2025, esta startup planea suministrar 12 gigavatios a centros de datos para 2044. Su diseño reduce residuos nucleares, pero su primera licencia fue rechazada en 2022. Relanzará su solicitud este año.
Saltfoss: reactores flotantes con inversores de élite
Propone instalar módulos en barcos (Power Barges). Atrajo 60 millones de dólares, incluyendo fondos de Bill Gates y Peter Thiel. Samsung Heavy Industries construirá los buques.
TerraPower: el megaproyecto de Bill Gates en Wyoming
Su reactor Natrium (345 MW) incluye almacenamiento térmico en sales fundidas para gestionar picos de demanda. Gates lidera la inversión a través de su fondo Cascade.
X-Energy: el favorito de Amazon
Recibió 700 millones en una ronda liderada por el Climate Pledge Fund de Amazon. Sus reactores refrigerados por gas generarán 80 MW usando «bolas de combustible» del tamaño de una bola de billar.
De la crisis energética a la oportunidad nuclear
Tras años de estancamiento, el consumo eléctrico en EE.UU. se disparó por la demanda de IA, según el reporte. La fisión nuclear resurge como alternativa frente a la intermitencia de renovables, aunque sigue siendo más cara que el gas natural. Los SMR buscan reducir costes mediante fabricación en serie.
Un futuro atómico (pero no inmediato)
Los primeros reactores comerciales de estas startups no operarán antes de 2030. Su éxito dependerá de superar barreras regulatorias y demostrar rentabilidad. Mientras, las tecnológicas aseguran capacidad a largo plazo para sus centros de datos.