Exportación de derivados de soya cae 36% en primer trimestre de 2025
Las ventas al exterior de subproductos como aceite y harina de soya sumaron $us 110,8 millones, según el INE. La cifra contrasta con los $us 173,3 millones del mismo periodo en 2024. El Gobierno reactivó las exportaciones del grano con un límite de 250.000 toneladas, pero persisten retrasos en permisos y suministro de diésel.
«Los números no mienten: el sector oleaginoso enfrenta un trimestre difícil»
El Instituto Nacional de Estadística (INE) confirmó que la caída de $us 62,5 millones en exportaciones de derivados de soya afectó principalmente a aceites, harinas y tortas. El informe no incluye datos sobre el grano, cuya comercialización fue suspendida temporalmente por el Ejecutivo. Pese al repunte del 27% en producción anunciado por el ministro Yamil Flores, Anapo denuncia retrasos en permisos para exportar las 250.000 toneladas autorizadas desde el 7 de mayo.
Frenos logísticos y combustibles
Jaime Hernández, gerente de Anapo, alertó que la falta de certificados de exportación y el desabastecimiento de diésel ULS en provincias «ponen en riesgo la siembra del 40% del área de invierno». La asociación vinculó ambos problemas a pérdidas económicas directas para los productores.
De la sequía a los controles
El sector arrastraba desde 2024 los efectos de una sequía que redujo la producción. Aunque el Gobierno levantó la prohibición de exportar soya, impuso un tope y reforzó controles a 17 productos de la canasta familiar, medida que Flores justificó como «contención a la especulación».
Un balance con luces y sombras
Mientras las estadísticas oficiales reflejan el desplome en derivados, la reactivación parcial del grano y el crecimiento productivo anunciado marcan una recuperación incipiente. Sin embargo, la demora en trámites y combustibles mantiene en vilo al sector agroindustrial cruceño.