Dólar paralelo roza Bs 19 y falta diésel en Bolivia
La divisa extranjera alcanza valores históricos y los precios de alimentos suben. Productores y transportistas exigen soluciones al Gobierno por la escasez de combustible y la distorsión del mercado. La crisis afecta directamente el poder adquisitivo de los bolivianos.
«El mercado está siendo distorsionado por decisiones políticas»
Klaus Frerking, presidente de la Cámara Agropecuaria del Oriente (CAO), denunció que la intervención estatal y factores externos impiden bajar los precios de la carne. «El dólar, el contrabando y la falta de diésel elevan los costos», afirmó durante un seminario en Santa Cruz. Según la CAO, el precio de la carne seguirá alto mientras persista la crisis estructural.
Impacto en el bolsillo
Fernando Romero, presidente del Colegio de Economistas de Tarija, advirtió que el alza del dólar paralelo (cercano a Bs 19) encarece alimentos básicos como huevo, queso y aceite. «Ya da miedo ir al mercado», señaló. Germán Molina, economista, destacó que los sectores de bajos ingresos son los más afectados.
Protestas por diésel y dólares
Transportistas y mineros realizaron marchas y bloqueos exigiendo abastecimiento de combustible y acceso a divisas. La Federación de Cooperativas Mineras Auríferas (FECOMAN) amenazó con multas de Bs 130.000 a sus afiliados que no participaran en las protestas. «Nuestros derechos no pueden ser vulnerados», declaró un dirigente.
Especulación vs. oferta
Mientras el Gobierno asegura que hay producción suficiente de aceite (precio oficial: Bs 14/litro), en los mercados se vende hasta en Bs 25. Jorge Amantegui, de la Cámara de Industrias Oleaginosas (CANIOB), atribuyó la disparidad a la especulación de intermediarios.
Un cóctel de factores críticos
Gary Rodríguez, gerente del Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE), identificó déficit fiscal, caída de reservas y dependencia de importaciones como causas de la crisis. «La economía también es psicología; necesitamos buenas señales», afirmó. La incertidumbre electoral agrava el escenario, según analistas.
El consumidor, en el ojo del huracán
La combinación de dólar alto, combustibles escasos y precios disparados reduce el poder adquisitivo de los bolivianos. Sin medidas concretas, la presión social y económica podría intensificarse en los próximos meses.