Dos sicarios del Comando Vermelho fugan del penal de máxima seguridad de Chonchocoro
Dos reclusos brasileños del Comando Vermelho escaparon del penal de Chonchocoro la madrugada del 17 de diciembre. La fuga, con sospecha de complicidad policial, activó un operativo nacional de búsqueda. Los fugados, Jangledson De Oliverira y Óscar Junior Terra Días de Floriano, cumplían condena por un asesinato por encargo vinculado al narcotráfico.
Detalles de una evasión planificada
La fuga ocurrió alrededor de las 03:00. Los reos utilizaron una escalera para superar los muros perimetrales. En el registro posterior, el Ministerio Público halló puertas con signos de forcejeo y un arma blanca. El fiscal Rodrigo Condarco confirmó la aprehensión de un policía de la torre de vigilancia y el arresto de entre cinco y siete funcionarios penitenciarios, incluido el director del penal.
Perfil y antecedentes de los fugitivos
Los evadidos son ciudadanos brasileños con tatuajes del Comando Vermelho (CV). Estaban recluidos previamente en el PC-7 de Palmasola, donde fueron señalados como autores materiales del asesinato de Remberto López Herbas. Según el fiscal Luis Alberto Hurtado, admitieron que el crimen fue un encargo de narcotraficantes del Trópico de Cochabamba. Aceptaron 30 años de prisión, lo que motivó su traslado a Chonchocoro.
Operativo de búsqueda y alerta nacional
La Policía activó el Plan Z, un operativo de prioridad máxima. Se desplegaron unidades en La Paz, El Alto, Viacha y rutas interdepartamentales. También se reforzaron los controles fronterizos, especialmente en Desaguadero, ante la posibilidad de que intenten salir del país. El director de Seguridad Penitenciaria, Juan Carlos Rebollo, supervisa el operativo.
Antecedentes: Un asesinato por encargo en prisión
Los ahora fugados estaban implicados en el asesinato de Remberto López Herbas dentro del PC-7 de Palmasola en noviembre. López Herbas, acusado de matar a un juez en Villa Tunari, murió por disparos en la cabeza. La investigación estableció que el crimen fue un encargo de narcotraficantes. Un tercer miembro del CV, Caique Lima Silva, fue identificado como el ejecutor material, mientras que Terra Días gestionó el ingreso del arma.
Cierre: Exposición de fallas sistémicas
El caso evidencia la capacidad de operación de organizaciones criminales transnacionales dentro del sistema penitenciario boliviano. La fuga desde un recinto de máxima seguridad y las detenciones de funcionarios apuntan a problemas de corrupción y control. La investigación del Ministerio Público continúa para determinar el alcance total de las complicidades.