Monopolio estatal y caída del 2,4% en pasajeros impulsan proyecto de cielos abiertos
Un mercado donde BoA controla el 92% de las operaciones y registra una contracción en el transporte de pasajeros pone sobre la mesa la urgente reforma de la Ley de Aeronáutica Civil. El debate se instala mientras el sector global crece a dos dígitos.
La paradoja boliviana: aviones internacionales con asientos vacíos
Un estudio del Centro de Estudios Populi, elaborado por el economista Carlos Aranda, diagnostica un servicio aeronáutico en retroceso. Mientras la demanda global de pasajeros creció un 10,4% en 2024, Bolivia anotó una caída del -2,4% pese a haber movilizado más de 4,6 millones de pasajeros en rutas nacionales. La normativa actual —la Ley 2902 y la RAB 129— prohíbe el cabotaje a aerolíneas extranjeras, lo que obliga a que aviones internacionales que hacen escala en, por ejemplo, Santa Cruz y La Paz, vuelen el tramo interno con butacas vacías. Una ineficiencia con sello legal.
Una reforma que mira más allá de los cielos
La bancada de la Alianza Libre ya presentó un proyecto para derogar los artículos restrictivos y permitir la libre competencia. Sin embargo, expertos como el presidente de la Asociación de Líneas Aéreas, Jorge Valle, y el abogado Álvaro Munguía, advierten que la discusión es más profunda: exige también reformas en la ATT, la DGAC y Naabol, entidades señaladas por tarifas «excesivas» y servicios deficientes. El cierre, pues, no es solo legal; es una carrera contra la propia estructura del Estado.