Exposición Etseasa Medi muestra la vida de cuatro pueblos amazónicos de Bolivia
La exposición ‘Etseasa Medi’ (‘nuestra tierra’ en tacana) exhibe en Santa Cruz las costumbres y relación con la naturaleza de los pueblos ese ejja, tacana, yaminahua y machineri. La muestra, en el Centro de Formación de la AECID, utiliza fotografía, video y objetos para acercar estas culturas al mundo urbano.
Una inmersión sensorial en la Amazonía
La exhibición reúne fotografías, videos y audios que muestran paisajes, actividades de subsistencia como la pesca, y objetos como flechas o vestimenta. El recorrido está acompañado por un sonido ambiental que recrea el canto de las aves de los territorios indígenas, ubicados principalmente en Pando.
Un trabajo de campo participativo
El material fue recopilado por un equipo multimedia e investigador mediante entrevistas y grupos focales, con el consentimiento de las comunidades. El fotógrafo OzZo Ukumari señaló que el trabajo se realizó pese a incendios forestales y escasez de combustible, con estancias de cinco a siete días en cada comunidad.
Las vivencias de los cuatro pueblos
La muestra incluye documentales donde los indígenas hablan de sus orígenes y organización. Los tacana relatan su desplazamiento por la explotación de goma y su lucha por preservar su lengua. Los ese ejja, nómadas y hábiles pescadores, enfrentan ahora la contaminación por minería ilegal.
Los yaminahua subsisten de la caza y la siembra y han desarrollado conocimientos de medicina tradicional. Los machineri, en la triple frontera, hablan su lengua, español y portugués, y se dedican a la extracción de goma y la confección de prendas con fibras naturales.
Un proyecto para la promoción de derechos
La exposición forma parte de un proyecto más amplio orientado a la promoción de los derechos indígenas. El director del centro de la AECID, Jesús Molina, explicó que esta iniciativa está cofinanciada por la Unión Europea (UE).
Una relación profunda con la naturaleza
El cierre de la muestra subraya el vínculo de estos pueblos con su entorno. Los cuatro pueblos obtienen del bosque y los ríos lo necesario para vivir, manteniendo una relación de respeto en la que, incluso, piden permiso a la naturaleza para conseguir alimento o medicina.