Dimite el gobierno búlgaro tras masivas protestas anticorrupción
El primer ministro Rosen Zhelyazkov presentó la dimisión de su gobierno minoritario. La decisión se produce tras una noche de grandes manifestaciones en Sofía y otras ciudades, y a 20 días de que Bulgaria adopte el euro. El ejecutivo, acusado de corrupción, ya había retirado su polémico presupuesto la semana pasada.
Una dimisión ante la presión ciudadana
El centro de la capital, Sofía, se llenó con decenas de miles de personas el miércoles por la noche. Los manifestantes proyectaron las palabras ‘Dimisión’ y ‘Fuera la mafia’ en el edificio del parlamento. El presidente Rumen Radev había respaldado previamente las protestas, pidiendo la salida del gobierno. Zhelyazkov declaró en televisión que escuchaba «la voz de los ciudadanos» y que esa «energía cívica debe ser apoyada».
Los actores clave de la crisis
Las protestas se centraban en la influencia de dos figuras: el oligarca Delyan Peevski, sancionado por EE.UU. y el Reino Unido, y el ex primer ministro Boyko Borissov. La manifestación del miércoles se organizó bajo el lema ‘¡Dimisión! Peevski y Borissov fuera del poder’. Peevski y su partido han sido un apoyo clave para el gobierno minoritario.
Antecedentes: Un gobierno en la cuerda floja
El gobierno de Zhelyazkov, en el poder desde enero, ya había sobrevivido a cinco mociones de censura y se esperaba que superara una sexta este jueves. La crisis política se produce a escasas semanas de un hito nacional: Bulgaria está previsto que adopte el euro el 1 de enero de 2025. Este paso no se considera en peligro a pesar de la inestabilidad.
Cierre: El desafío de formar un nuevo ejecutivo
Los ministros continuarán en funciones hasta la elección de un nuevo gabinete. El primer ministro saliente afirmó que el país enfrenta un gran desafío y que los ciudadanos deben producir «propuestas auténticas» sobre el futuro gobierno. Bulgaria ocupa uno de los puestos más bajos de Europa en el índice de percepción de la corrupción de Transparencia Internacional.