El proyecto Instantáneas nació a mediados de los años 80 bajo la dirección de Wáskar Montenegro Céspedes, un profesional con un profundo interés por el análisis económico y político, y con un firme compromiso por comprender y explicar la realidad nacional.
Su origen se enmarca en el complejo periodo de 1982 a 1985, durante la crisis de la Unidad Democrática y Popular (UDP), uno de los momentos más críticos en la historia política, social y económica de Bolivia. Esta coyuntura impulsó transformaciones estructurales que culminaron en 1985 con la aplicación del Decreto Supremo 21060, orientado a estabilizar la economía e introducir reformas de amplio alcance.
En este contexto, Montenegro fundó la revista “Instantáneas Económicas”, una publicación especializada de circulación limitada, destinada a sectores económicos y empresariales. Su principal objetivo era ofrecer información precisa, objetiva y sintetizada sobre la dinámica económica del país. Gracias a su enfoque analítico y rigor informativo, la revista fue bien recibida por los actores que requerían evaluaciones constantes y confiables del entorno económico.
La primera etapa del proyecto concluyó en 1986, cuando Montenegro fue asignado a funciones laborales en el exterior. A su retorno, en 1990, relanzó la publicación bajo el nombre de “Instantáneas Económicas Internacionales”, incorporando contenidos de alcance global y estableciendo una red de corresponsales en Londres, España, Suecia y Argentina. A pesar de su visión de lograr una distribución masiva, las limitaciones financieras impidieron consolidar ese objetivo.
En 1999, Montenegro impulsó una nueva fase del proyecto. Amplió la cobertura temática —incluyendo asuntos económicos, políticos, sociales y de opinión— y apostó por la incipiente difusión digital. Con recursos limitados y sin financiamiento externo, organizó el primer boletín informativo boliviano distribuido por Internet, denominado simplemente “Instantáneas”, anticipándose al desarrollo posterior de los medios digitales en el país.

La iniciativa se mantuvo activa hasta 2001, acumulando 92 publicaciones entre ediciones impresas y digitales. Por razones de salud, Montenegro debió abandonar el proyecto, falleciendo el 9 de diciembre de 2003.
A pesar de las dificultades, Wáskar Montenegro dejó un legado significativo para el periodismo y la difusión informativa en Bolivia. Su visión, orientada a integrar innovación tecnológica con análisis riguroso, convirtió a Instantáneas en una de las primeras experiencias de periodismo digital en el país. Su compromiso con la información de calidad continúa siendo un referente para quienes apuestan por fortalecer la comunicación y el acceso al conocimiento en el entorno nacional.