Liberales progresistas ganan elecciones en Países Bajos por estrecho margen
El partido D66 superó por apenas unos votos a la extrema derecha de Geert Wilders. Los resultados abren un escenario político nuevo tras más de 20 años de gobiernos de derecha. El crecimiento de los democristianos, que rechazan pactar con la ultraderecha, facilita un posible gobierno de centroizquierda.
Un giro histórico en la política neerlandesa
El vuelco político cierra una etapa de 23 años durante la cual el poder se movió hacia la derecha, desde el socialdemócrata Wim Kok hasta el ultraderechista Geert Wilders. La victoria de los liberales progresistas del D66 rompe esa tendencia y sitúa a Rob Jetten como figura clave para formar un nuevo ejecutivo.
Implicaciones para la Unión Europea
Países Bajos abandona el bloque de países frugales que se resistían a los fondos comunes europeos. Este cambio realinea al país con los gobiernos progresistas de España, Dinamarca, Rumanía y Lituania. La nueva orientación política afectará también a las políticas migratorias y económicas.
Antecedentes: Dos décadas de desplazamiento a la derecha
Desde la salida del socialdemócrata Wim Kok en 2002, el cargo de primer ministro fue ocupado durante ocho años por el democristiano Jan Peter Balkenende, seguido por el liberal de derechas Mark Rutte hasta 2024, cuando fue sucedido por Dick Schoof bajo las órdenes del ultraderechista Geert Wilders.
Cierre: Un nuevo mapa de alianzas
El sistema político neerlandés, con 14 fuerzas en la Cámara Baja, obliga a complejas negociaciones. El aislamiento de la extrema derecha euroescéptica es un punto de acuerdo entre las formaciones. Los liberales progresistas deberán buscar apoyos en socialdemócratas o democristianos para formar un gobierno estable.
 
											 
															 
															 
															 
															 
															 
															 
															 
															 
															 
															 
															