Portugal cierra la regularización de inmigrantes dentro del país
Los solicitantes de residencia deben obtener ahora el visado correcto antes de viajar. Portugal ha modificado su modelo de inmigración, eliminando la vía de entrada como turista para regularizar la situación posteriormente. El cambio busca reducir los retrasos administrativos y ajustar la llegada de migrantes a las necesidades del mercado laboral.
Nuevos requisitos para la residencia
El visado de búsqueda de empleo de 120 días ha desaparecido. Será sustituido por un futuro Visado de Buscador de Empleo Cualificado para perfiles especializados. Los consulados han pausado las citas a la espera de que el gobierno publique la lista de cualificaciones necesarias.
Cambios en la reagrupación familiar
El proceso de reunificación familiar es más lento y estricto. La mayoría de los solicitantes necesitan dos años de residencia legal previa. Las parejas deben acreditar 18 meses de convivencia antes de que el residente entrara en Portugal. El permiso inicial para parejas dura 15 meses y el plazo de decisión puede extenderse hasta 270 días.
Plazos de transición para residentes actuales
Dos periodos de transición de 180 días permiten a los residentes actuales solicitar la conversión a categorías de alta cualificación. Las familias que ya se encuentren en Portugal y cumplan los requisitos podrán presentar su documentación durante este plazo.
Presión institucional detrás del cambio
Portugal se había convertido en un imán para migrantes extracomunitarios, estudiantes y teletrabajadores. Sus instituciones enfrentaban grandes acumulaciones de solicitudes y una aplicación desigual de las normas. Las autoridades trasladan ahora el control desde el interior del país a embajadas y consulados.
Repercusión para la comunidad brasileña
Los brasileños, la comunidad extranjera más grande de Portugal, se ven afectados directamente. Muchos dependían de la regularización dentro del país o de estancias cortas para buscar trabajo. Esas vías están cerradas, sustituidas por requisitos más altos y plazos más largos.
Un nuevo rumbo para las economías europeas
El giro de Portugal actúa como indicador de cómo las economías europeas, con poblaciones envejecidas, pueden reajustar sus políticas migratorias. El sistema se inclina ahora hacia quienes puedan acreditar cualificaciones, conseguir contratos o cumplir exigentes demandas documentales antes de viajar.