Ejecutan al hijo de la alcaldesa de San Ramón en plaza de Beni
32 disparos en la ejecución. El ataque se vincula a una pugna entre organizaciones criminales del narcotraficante Sebastián Marset y la estructura de Yasser Andrés Vásquez Cardona, alias Coco Vásquez.
Un mensaje con 32 impactos
El viceministro de Régimen Interior y Policía, general Jhonny Aguilera, declaró que fue un ataque calculado y letal desde una camioneta Fortuner. La cifra de disparos responde a eliminar al objetivo, enviar un mensaje intimidatorio y demostrar capacidad operativa.
Antecedentes de un ajuste de cuentas
Jhonatan López Rodríguez, la víctima, ya había sobrevivido a un atentado en abril en el Cambódromo de Santa Cruz. La Policía vincula aquel ataque con el clan Marset. La hipótesis oficial sugiere que pudo cambiar de bando dentro de la estructura criminal.
Complicidad y obstáculos judiciales
La investigación revela operativos con uso de rutas fluviales y pontones en el Beni. Aguilera detalló que hay detenidos en la Armada Boliviana. Además, denunció trabas judiciales, como el rechazo de siete solicitudes de allanamiento por un juez.
Implicaciones para la seguridad
El caso evidencia la pugna por el control del negocio del narcotráfico entre facciones criminales. La coordinación entre Policía, Fiscalía y Justicia, así como la cooperación internacional para capturar a Marset, se presentan como desafíos pendientes para el gobierno entrante.