Amnistía Internacional documenta 43 desapariciones forzadas en Ecuador desde 2023
43 desapariciones forzadas a manos de agentes estatales han sido documentadas por Amnistía Internacional (AI) desde que el presidente Daniel Noboa asumió el cargo en 2023. El aumento de las denuncias coincide con el despliegue de policías y soldados en las calles ordenado por el gobierno para enfrentar a las mafias.
Casos bajo investigación
El caso del albañil Dave Loor, detenido por militares en agosto de 2024 y del que no se sabe nada desde entonces, forma parte de las desapariciones documentadas. La fiscalía registra un aumento en las denuncias de ejecuciones extrajudiciales, que pasaron de seis en 2023 a 19 en 2024. Las quejas por abusos de agentes estatales subieron un 125% en el mismo periodo.
Repercusión en las familias
Las familias de las víctimas exigen respuestas. ‘Si el presidente Daniel Noboa no hubiera mandado a los militares a las calles (…) no seríamos 43 familias en zozobra’, declaró Diana Roca, tía de Dave Loor. La situación afecta especialmente a poblaciones marginales, según expertos.
Contexto de la ofensiva de seguridad
El aumento de las denuncias se produce en el marco de los estados de excepción y la declaración de un conflicto armado interno por parte del gobierno de Noboa. Soldados y policías fueron desplegados para enfrentar la violencia de las bandas narcotraficantes en uno de los países más peligrosos de Latinoamérica.
Factores de riesgo según expertos
Expertos en seguridad como Michelle Maffei señalan que el ejército no está entrenado para proteger civiles. Los soldados asumieron labores no militares, como administrar cárceles y realizar patrullajes urbanos, lo que supone riesgos de abusos. Además, existe un ‘descontento’ en las tropas por la presión del gobierno por obtener resultados.
Antecedentes y comparativas
La situación recuerda al escándalo de los ‘falsos positivos’ en Colombia, donde al menos 6.400 civiles fueron asesinados y presentados como guerrilleros abatidos. En Ecuador, el general retirado Luis Altamirano señala los cambios repentinos en la cúpula militar como una razón de inestabilidad en los cuarteles.
Implicaciones y cierre
La situación genera una crisis de derechos humanos. El director de una organización local, Billy Navarrete, califica el número de denuncias de desapariciones como inédito y subraya que se trata de ‘detenciones arbitrarias de personas que no eran peligrosas’. El caso mediático de los cuatro menores hallados calcinados tras un arresto militar en Guayaquil ejemplifica la gravedad de la situación.