Voluntarios plantan 2.000 árboles en la reserva Laguna Sucuará de Roboré
Más de 200 voluntarios participaron en una jornada de reforestación en la Reserva de Vida Silvestre Natural Laguna Sucuará. La actividad conmemoró el aniversario del área protegida y buscó reestablecer el ecosistema local.
Una iniciativa que articula a la comunidad
La organización Eco Hábitat, impulsada por el escritor local Luciano Antelo, lideró la actividad. La propuesta logró articular a diversas instituciones locales y regionales en torno al objetivo común de proteger el patrimonio natural. Entre los participantes estuvieron el Gobierno Municipal de Roboré, las Fuerzas Armadas y la Fundación Natura Bolivia.
Más allá de la plantación
Además de la colocación de plantines, se habilitó una nueva área de recreación ecológica. Esta acción busca reforzar el valor turístico, educativo y social de la laguna, promoviéndola como un espacio de encuentro para la comunidad.
Un punto de inflexión para la conservación
Randy Gonzales, de la Fundación Natura Bolivia, calificó la jornada como “un punto de inflexión” por el mayor compromiso evidenciado. Las autoridades municipales se comprometieron a destinar materiales y personal para el seguimiento de los árboles plantados, mientras que el Comité de Gestión busca replicar estas acciones para recuperar la laguna, actualmente afectada por la sequía.
La laguna Sucuará, un refugio de vida
Esta reserva municipal, creada en 2017, abarca 1.315 hectáreas. Constituye un refugio para aves, reptiles y mamíferos, siendo también un sitio clave para el equilibrio hídrico y la identidad ambiental de la Chiquitania.
Un legado natural que se fortalece
La reforestación consolida los esfuerzos de gestión y conservación en el área. Las acciones conjuntas entre la comunidad y las instituciones fortalecen la protección legal y el cuidado práctico de este espacio vital, asegurando su preservación para el futuro.