Foro Económico Mundial afronta relevo y pérdida de influencia en 2025
El fundador Klaus Schwab dejó la presidencia tras una revisión interna. El informe, realizado por un bufete suizo, no halló delitos pero señaló límites difusos en gastos personales e institucionales. Schwab impugnó partes del proceso judicialmente.
Un cambio de era en Davos
La transición de poder tras cinco décadas de control fundacional resultó inusualmente tensa. La imagen pública del foro se resintió pese a la asistencia de miles de participantes y más de cincuenta jefes de Estado o Gobierno. Fotografías de salas semivacías y ausencias notables reforzaron la percepción de que su poder de convocatoria ya no es automático.
Financiación y competencia
La organización se mantiene con ingresos anuales significativos de membresías corporativas y partnerships. La participación es costosa para las empresas, lo que sostiene la percepción de cultura de «pago por participar». Foros como la Iniciativa de Inversión Futura de Riad rivalizan como centro de acuerdos para consejeros delegados, mientras la Conferencia de Seguridad de Múnich domina en geopolítica.
El contexto de la pérdida de influencia
Entre 2019 y 2025, el aura del Foro Económico Mundial (FEM) se desvaneció por la turbulencia en la gobernanza, la cambiante geopolítica y un mercado saturado de cumbres. El punto de inflexión fue 2025.
Un futuro por definir
El FEM afirma que su misión de reunir a empresas, gobiernos y sociedad civil perdura. Sin embargo, el centro de gravedad se ha desplazado hacia foros de seguridad, cumbres de inversión y mesas gubernamentales formales. La institución trabaja ahora para demostrar su relevancia en un mundo más multipolar.