Asma afecta a 262 millones de personas y es controlable con tratamiento
262 millones de personas padecían asma en 2019 según la OMS. La enfermedad respiratoria crónica no tiene cura pero es controlable mediante prevención, tratamiento personalizado y educación.
Comprensión y manejo de la enfermedad
El asma implica inflamación y estrechamiento de los bronquios, provocando tos, sibilancias y dificultad respiratoria. Griselda Vargas de UNIFRANZ explica que “puede variar de episodios leves a situaciones potencialmente mortales”. El control requiere identificación de factores de riesgo como alérgenos y humo del tabaco.
Diagnóstico y avances terapéuticos
El diagnóstico se realiza mediante historia clínica y espirometría. El tratamiento incluye inhaladores de rescate y prevención, espaciadores y, en casos graves, medicamentos biológicos. Vargas señala que “la investigación actual busca terapias más específicas” dirigidas a la inflamación.
Desmitificando creencias sobre el asma
El neumólogo Alejandro Meretta aclara que “es una enfermedad crónica, no tiene cura” pero es controlable. Sobre los corticoides inhalados, especifica que su absorción sistémica es mínima cuando se usan correctamente.
Vivir plenamente con la condición
El caso de Berenice muestra que con disciplina y apoyo médico se puede desarrollar una vida normal. Meretta destaca que “lo fundamental es el autocontrol”, combinando tratamiento con hábitos saludables para mantener el control de la enfermedad.