Ejército de Madagascar asume el control tras impeachment a Rajoelina
Una facción militar asumió el poder tras el voto de impeachment del Parlamento al presidente. Andry Rajoelina disolvió la Asamblea por decreto en Facebook y abandonó el país.
Golpe de timón institucional
La Crisis constitucional estalló cuando la Asamblea Nacional votó destituir al presidente. Minutos después, una facción militar anunció por radio nacional que tomaba el control para dirigir una transición. Rajoelina respondió disolviendo el Parlamento mediante un decreto publicado en Facebook antes de salir de Madagascar, alegando amenazas contra su vida.
Actores clave del conflicto
El coronel Michael Randrianirina, de la unidad CAPSAT, encabeza la intervención militar. Esta misma unidad ayudó a llevar a Rajoelina al poder en 2009. Ahora apoyó a los manifestantes, escoltando protestas y negándose a disparar. El movimiento de protesta, liderado por jóvenes, utilizó como símbolo una bandera con calavera.
Antecedentes de la crisis
El detonante fue práctico, no ideológico: protestas juveniles por apagones, grifos secos, corrupción y mala gestión. La crisis derivó en una lucha por la autoridad legítima entre el Parlamento, la presidencia y el ejército. Esta pugna determina quién controla las fuerzas de seguridad, firma presupuestos y negocia con donantes.
Repercusión e implicaciones
Madagascar, con tres cuartas partes de su población en pobreza, enfrenta riesgos por el vacío de poder. Una transición civil rápida podría estabilizar precios y mantener a los donantes. Un duelo prolongado entre autoridades drenaría la confianza, afectando exportaciones como la vainilla y empeorando los servicios.