Debate vicepresidencial genera tensión por acusaciones de racismo y corrupción
El Tribunal Supremo Electoral (TSE) organizó el debate entre Juan Pablo Velasco (Alianza Libre) y Edmand Lara (PDC). El evento se caracterizó por acusaciones mutuas que rompieron el formato previsto.
Enfrentamiento por escándalos financieros y familiares
Edmand Lara mencionó el escándalo del extinto Banco Fassil, vinculando al padre de Velasco con la entidad. Lara aseguró tener documentos que demostrarían que Velasco recibió dinero y que su padre era socio del grupo propietario.
Acusaciones de racismo y discriminación
Lara reiteró en todos los bloques presuntos tuits racistas de Velasco hacia el occidente del país. Velasco respondió cuestionando la insistencia de su contrincante y exhortándolo a enfocarse en propuestas.
Comparaciones y lapsus estratégicos
Velasco se refirió a Lara como «Evo» en dos ocasiones, en una aparente comparación con el expresidente Evo Morales. Ambos candidatos reconocieron haber tenido lapsus durante sus intervenciones.
Disputa sobre declaraciones pasadas
Velasco confrontó a Lara por sus críticas anteriores contra Rodrigo Paz. Lara ofreció disculpas y acusó a Alianza Libre de una campaña de guerra sucia para manipular sus declaraciones.
Antecedentes del debate
El TSE organizó el debate vicepresidencial para conocer las propuestas de los candidatos. El evento derivó en un intercambio con acusaciones de racismo, escándalos financieros y menciones a familiares.
Cierre e implicaciones
El debate evidenció profundas diferencias entre los candidatos. Los ataques personales marcaron la dinámica del encuentro, desplazando el debate programático previsto inicialmente.