Campaña territorial domina estrategias para balotaje boliviano
Más de 3,7 millones de votos están en disputa. Los binomios abandonan las redes para concentrarse en el contacto directo con electores en calles y plazas.
El botín electoral clave
El universo de electores incluye los 2,2 millones de votos de las seis fuerzas no clasificadas y un crucial bolsón de más de 1,5 millones entre nulos y blancos. Los 1,3 millones de votos nulos, promovidos antes por el expresidente Evo Morales, son el objetivo central que ambos frentes buscan capitalizar.
Despliegue en el territorio
La campaña se centra en sectores populares mediante concentraciones y visitas a mercados. El despliegue abarcó al menos 38 municipios distintos, priorizando el contacto personal sobre la propaganda digital.
Ofensiva de la alianza Libre
Jorge ‘Tuto’ Quiroga visitó 17 municipios, reforzando plazas fuertes e incursionando en territorios rivales. En El Alto, bastión del PDC, su candidato a la Vicepresidencia, Juan Pablo Velasco, realizó actividades folclóricas buscando acercamiento con sectores populares.
Estrategia del PDC
Rodrigo Paz y Edmand Lara recorrieron 21 municipios, consolidando bases y buscando votos de fuerzas eliminadas. La visita de Paz a Trinidad, donde Unidad fue la fuerza más votada, apuntó directamente a capturar ese electorado sin representación.
Antecedentes de la contienda
La batalla presidencial se decidirá en mayor medida en el terreno que en las redes sociales. La capacidad de generar conexiones genuinas y convencer a votantes indecisos determinará al ganador.
Cierre de campañas
Las estrategias se centran en la presencia física para captar un electorado fragmentado. El resultado dependerá de la efectividad para movilizar los votos no asignados en la primera vuelta.