Tiroteo en centro de ICE de Dallas deja un inmigrante muerto y dos heridos
Un detenido murió y otros dos resultaron heridos en un tiroteo perpetrado por un francotirador contra un centro del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos (ICE) en Dallas. El atacante, identificado como Joshua Jahn, se suicidó. El FBI investiga el hecho como un acto de violencia selectiva.
Un ataque desde un tejado cercano
El tirador, Joshua Jahn, un hombre blanco de 29 años, disparó con un rifle de cerrojo desde un tejado adyacente contra una furgoneta de transporte en la puerta de seguridad del edificio. Las autoridades encontraron una bala con la inscripción “ANTI-ICE”. La secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem, ordenó reforzar la seguridad en todas las instalaciones del ICE.
Las víctimas y la respuesta inmediata
Las víctimas eran detenidos bajo custodia federal; las autoridades no han revelado sus identidades. Los heridos se encuentran en estado crítico. Ningún agente del ICE resultó herido. Un testigo relató que el personal del edificio llevó a los presentes a una zona segura al activarse el protocolo por tirador activo.
La investigación y las reacciones políticas
El FBI está investigando el tiroteo como un acto de violencia selectiva. Horas después del incidente, agentes allanaron una vivienda vinculada a Jahn. El vicepresidente JD Vance y el senador Ted Cruz pidieron el fin de los ataques contra las fuerzas de seguridad. Asociaciones de abogados de inmigración y grupos activistas condenaron la violencia.
Antecedentes: Una serie de ataques recientes
Este incidente es el último de una serie de ataques públicos selectivos en Estados Unidos. Se produjo dos semanas después de la muerte del activista conservador Charlie Kirk y en un contexto de endurecimiento de la política migratoria que ha generado reacciones en contra de los agentes del ICE.
Cierre: Preocupación por la seguridad en las instalaciones
El tiroteo expone vulnerabilidades en la seguridad de las oficinas del ICE, que varía según la ubicación. Algunas instalaciones, como la de Dallas, tienen zonas de carga expuestas y puntos estratégicos cercanos para francotiradores, lo que representa un riesgo de ataque externo.