China renuncia a privilegios comerciales y presiona a Brasil, India y Sudáfrica
China anunció el 23 de septiembre de 2025 que dejará de reclamar el Trato Especial y Diferenciado en futuros acuerdos de la Organización Mundial del Comercio. Esta decisión elimina un obstáculo clave para modernizar las normas comerciales globales.
Un nuevo estándar para las economías emergentes
Con una economía de casi 18 billones de dólares, China ya no cumple los criterios para las flexibilidades de país en desarrollo. Al renunciar a plazos de transición más largos y normas más laxas sobre subsidios, despeja el camino para negociaciones sobre comercio digital y estándares ambientales.
Presión inmediata sobre Brasil
Brasil renunció a este trato en 2019 pero lo recuperó después. Ahora debe elegir entre seguir una reforma coherente o arriesgarse al aislamiento diplomático si insiste en mantener privilegios obsoletos.
India, el mayor beneficiario actual
India es el principal reclamante del S&DT. Sus socios comerciales presionarán a Nueva Delhi para que siga el ejemplo de China o se enfrente a bloquear la modernización de la OMC.
El dilema de Sudáfrica
Sudáfrica utiliza este trato para proteger sus sectores de acero y agricultura. La decisión china fuerza a Pretoria a sopesar la protección de empleos locales frente a la oportunidad de influir en nuevas normas comerciales.
Reacción de la OMC y próximos pasos
La Directora General de la OMC, Ngozi Okonjo-Iweala, calificó la decisión como un momento pivotal. Este movimiento podría impulsar acuerdos concretos en disciplinas de subsidios y medidas relacionadas con el clima.
Un precedente que cambia las reglas del juego
La renuncia de China marca un raro precedente de una gran economía que abdica de un estatus preferente. Este giro demuestra cómo los cambios en el peso económico pueden desbloquear procesos multilaterales estancados.