Internos de Morros Blancos denuncian vulneración de derechos procesales y humanos
Sentencias firmadas sin revisión y audiencias suspendidas indefinidamente. Los reclusos reportan condiciones inhumanas y temen represalias por sus denuncias.
Crisis en el sistema judicial
Los privados de libertad señalaron que los expedientes no son revisados de manera exhaustiva y que las sentencias se firman sin atender los recursos de apelación. Esta situación incrementa la desconfianza en el sistema y prolonga injustamente su reclusión.
Audiencias suspendidas sin explicación
Denunciaron que las audiencias programadas suelen ser canceladas sin motivo claro, lo que alarga los procesos judiciales de forma indefinida. Expresaron que «la justicia nos tiene olvidados».
Condiciones carcelarias críticas
El informe da cuenta de contagios de enfermedades y falta de acceso a agua potable. Existen personas de entre 80 y 90 años que no pueden valerse por sí mismas, personas con discapacidad y al menos 16 internos diagnosticados con esquizofrenia que no reciben atención adecuada.
Desigual aplicación de beneficios
Mientras en departamentos como La Paz se aplica la redención de penas «dos por uno», en Tarija solo se descuentan cuatro meses por un año de trabajo. En estudios académicos, se reducen apenas tres meses por dos años de formación.
Temor a represalias y medidas de presión
Los delegados expresaron temor a sufrir traslados a otros penales como castigo encubierto. Ante la falta de respuestas, algunos internos plantearon iniciar una huelga de hambre como último recurso para ser escuchados.
Antecedentes de la denuncia
Las quejas fueron recogidas en un informe resultado de una reunión de coordinación entre delegados del recinto carcelario y autoridades judiciales, al que accedió la Agencia de Noticias Fides (ANF).
Implicaciones de la crisis
La situación refleja un cuadro de crisis en el sistema penitenciario boliviano, combinando mora judicial, precariedad en las condiciones de vida y vulneración de derechos fundamentales.