Droga sintética ‘el químico’ se extiende entre jóvenes cubanos
Una dosis cuesta 100 pesos (0,25 USD). El consumo de este cannabinoide sintético, altamente adictivo y potente, ha aumentado en La Habana y provincias, en un país con tradicionalmente baja drogadicción.
Alto impacto a bajo costo
La sustancia, un cóctel de componentes tóxicos como anestésicos para animales o formol, se impregna en hierba o papel. Un militar experto del Ministerio del Interior señala que su efecto es entre 50 y 100 veces superior al THC del cannabis.
Consecuencias físicas y respuesta social
Los adictos presentan síntomas como convulsiones, taquicardias y falta de coordinación, lo que deriva en una marcha tipo zombi. Pastor evangélicos, como Rotyam Castro, han creado centros de rescate para la rehabilitación, que se realiza sin medicamentos, mediante oración y trabajo.
Contexto de la crisis
Un pastor vinculó el auge de esta droga a la profunda crisis económica que atraviesa la isla, además de su alta capacidad adictiva y su bajo coste.
Medidas oficiales y futuro
Las autoridades han endurecido las sanciones contra traficantes y lanzaron una campaña de prevención. Jóvenes en rehabilitación, como Josué Ángel Espinosa, aspiran a reinsertarse y abrir sus propios negocios.