Alemania cubre su demanda de rocas con producción nacional en 2700 plantas
La industria de áridos alemana produce 231 millones de toneladas de grava y arena y 203 millones de toneladas de rocas trituradas. Estos materiales se destinan principalmente a la construcción de carreteras, hormigón y ferrocarriles.
Dos realidades extractivas contrastadas
En Solnhofen, la extracción del patentado Solnhofener Naturstein es artesanal debido a la fragilidad de la piedra, que requiere trabajo manual con martillos. A pocos kilómetros, otra cantera de caliza jurásica emplea maquinaria pesada y voladuras para extraer bloques destinados principalmente a una fábrica de cemento.
Un oficio en extinción
Hassan Sener es maestro hackstock, un trabajo que depende de la experiencia y no de una formación reglada. Su labor consiste en golpear losas de piedra para comprobar su calidad mediante el sonido, en un proceso físicamente exigente.
El predominio de la maquinaria
La mayoría de las 2500 canteras y graveras del país operan con grandes máquinas. Solo un 10% de la producción de la cantera de Jura-Kalkstein se destina a obra, siendo el resto para cemento o jardinería.
Antecedentes de la industria
La demanda de las losas de Solnhofen se ha reducido a casi la mitad en los últimos 30 años. No están disponibles en el comercio general y solo se pueden adquirir bajo pedido.
Un futuro condicionado por la burocracia
La principal limitación para el sector son los procedimientos de autorización, que pueden demorarse más de una década. Las empresas deben presentar planes de renaturalización con décadas de antelación, lo que ha llevado al cierre de cientos de operaciones.