Diputados aprueban ley que suspende embargos y difiere créditos
La norma suspende embargos y pagos por seis meses para deudores de vivienda social y microempresas. La iniciativa, aprobada en la Cámara de Diputados, busca dar alivio temporal a las familias. Ahora pasa al Senado para su revisión.
Un respiro financiero temporal
La Cámara de Diputados aprobó en la madrugada de este viernes, 12 de septiembre de 2025, la “Ley Excepcional de Suspensión Temporal de Embargos y Ejecución de Sentencias”. La norma plantea una pausa de seis meses en embargos y en el pago de cuotas de capital e intereses para créditos de vivienda de interés social y para unidades económicas de tamaño micro y pequeña. El objetivo es que las familias y pequeños negocios puedan reorganizar sus finanzas.
Las voces a favor y en contra
El Ministerio de Economía y Finanzas Públicas aseguró que se trata de una medida “temporal” que “no compromete la estabilidad del sistema financiero”. La Cámara de Diputados aclaró que el diferimiento “no equivale a una condonación de la deuda”. En contra, la Asociación de Bancos Privados de Bolivia (ASOBAN) expresó su “profunda preocupación”, advirtiendo que la medida podría dificultar el acceso a nuevos créditos. El economista Joshua Bellott coincidió, alertando que una nueva postergación podría frenar el crecimiento de la cartera crediticia y afectar la liquidez.
Un precedente en la memoria del sistema
El texto menciona que un diferimiento aplicado en el año 2020 comprometió unos 3.500 millones de dólares y que “todavía quedan cerca de $us 800 millones” pendientes de pago de esa medida anterior. Este antecedente es utilizado por los críticos de la nueva ley para argumentar sus posibles efectos en la liquidez del sistema financiero.
El alivio inmediato y sus posibles efectos
La repercusión para el ciudadano es un alivio financiero inmediato al no tener que pagar sus cuotas ni enfrentar embargos por seis meses. Sin embargo, las advertencias de ASOBAN y analistas indican que a medio plazo, la medida podría restringir el acceso a nuevos créditos, en especial para los sectores más vulnerables, y afectar la liquidez del sistema.