Primer ministro francés advierte sobre la deuda antes de su derrota parlamentaria
François Bayrou perdió el voto de confianza en la Asamblea Nacional. Ocurrió este lunes en París tras no conseguir apoyo para su combate contra la deuda pública. El país se enfrenta a la elección de un nuevo premier, disolución de la Asamblea o dimisión presidencial.
Un último alegato contra la deuda
En un discurso previo a la votación, el primer ministro centrista afirmó que ‘nuestro pronóstico vital está en riesgo’ debido al ‘sobreendeudamiento’. Señaló que ‘Francia no ha tenido un presupuesto equilibrado en 51 años’ y denunció una ‘adicción’ a la deuda, achacándola a una ‘increíble sucesión de vicisitudes del destino desde 2020’, incluyendo la COVID-19, la guerra en Ucrania y la crisis energética.
La advertencia a los diputados
Bayrou declaró a los parlamentarios que ‘tienen el poder de derrocar al gobierno, pero no tienen el poder de borrar la realidad’. Advirtió que, si su gobierno caía, ‘el problema, la amenaza, el riesgo para Francia seguirá intacto’, afirmando que ‘el gasto seguirá aumentando y la carga de la deuda será cada vez más pesada’.
El peso sobre las nuevas generaciones
Presentó a los jóvenes como las principales víctimas, afirmando que las nuevas generaciones ‘soportarán, durante 20 o 30 años, o incluso más, el peso de los billones de dólares en deuda’ que sus mayores han contraído. Llamó a ‘los mayores a unir fuerzas para reducir la deuda que los más jóvenes tendrán que pagar’.
Un panorama económico cargado
El primer ministro utilizó cifras concretas, afirmando que ’50 mil millones de euros son creados por el trabajo’ y ‘más de 100 mil millones se transfieren a nuestros acreedores’. Declaró que ‘nuestro país trabaja, cree enriquecerse, y cada año se empobrece un poco más’, calificando esta situación como ‘una hemorragia silenciosa, subterránea, invisible e insoportable’.
Una salida que no se concretó
Para combatir la deuda, Bayrou creía que ‘todo está listo, todo se está gestando’ y que solo faltaba ‘la determinación de quienes quieren salir de ella’. Proponía ‘reequilibrar’ el comercio exterior desarrollando sectores como la agricultura y la industria, e indicó la necesidad de encontrar un tipo de contribución que garantice que las personas con ingresos muy altos y un patrimonio muy elevado sean llamadas a contribuir específicamente.
Un capítulo que se cierra
El discurso de Bayrou funcionó como un testamento político, ya que se anticipaba su caída. Con la Asamblea Nacional sin mayorías claras, los socialistas se postulaban para colocar su primer ministro y un gobierno de izquierda, mientras los Republicanos conservadores mantenían su libertad de voto. Bayrou permanecerá en el palacio de Matignon hasta que el presidente Emmanuel Macron nombre un reemplazo, disuelva la Asamblea o renuncie, permitiendo elecciones anticipadas.