Evo Morales no promoverá el voto nulo ni apoyará a candidatos
El expresidente desmiente acuerdos con la oposición para la segunda vuelta. Anunció su postura desde su bastión, donde se encuentra protegido por sus seguidores. La decisión se produce tras una primera vuelta donde el voto nulo superó el 19%.
Una postura definida desde la radio
El expresidente Evo Morales aseguró que no promoverá el voto nulo en la segunda vuelta del 19 de octubre. Además, afirmó que tampoco apoyará a ninguno de los dos candidatos opositores, Rodrigo Paz o Jorge ‘Tuto’ Quiroga. Declaró desde la Radio Kawsachun Coca que es «falso, totalmente falso» que tenga acuerdos con partidos de derecha, insistiendo en que actúan por «principios y valores».
El contexto de la primera vuelta
Morales promovió el voto nulo en la primera vuelta del 17 de agosto, argumentando que «ningún candidato representaba al pueblo boliviano». Esta opción alcanzó un significativo 19,78 % de los votos. La victoria fue para Rodrigo Paz (PDC) con el 32,06 %, seguido por Jorge Tuto Quiroga (Alianza Libre) con el 26,70 %, lo que obliga a una segunda vuelta por primera vez en la historia democrática boliviana.
La situación personal de Morales
El expresidente no pudo participar en los comicios y su campaña se vio limitada a su bastión. Esto se debe a una orden de captura en su contra por un caso de trata agravada de personas y a que no pudo participar al no tener un partido político y por un fallo constitucional que impide su reelección.
El fin de una era política
El partido oficialista Movimiento al Socialismo (MAS), que gobernó durante casi 20 años, obtuvo solo un 3,17 % de los votos. Esto marca el final de su etapa en el poder, en medio de una fuerte división oficialista protagonizada por el distanciamiento de Morales con el presidente Luis Arce desde finales de 2021. El partido se salvó por poco de perder su personería jurídica, que exige un mínimo del 3% de los votos.
Un ciclo electoral sin precedentes
Bolivia vive un proceso electoral histórico tras casi dos décadas de gobiernos del MAS. La descalificación del partido que pretendía avalar la candidatura de Morales y el bajo rendimiento de su agrupación tradicional fracturaron el oficialismo. Esto condujo a una primera vuelta sin un claro ganador y a la necesidad de una segunda votación presidencial.
El escenario queda definido para octubre
La no intervención de Morales elimina un factor de incertidumbre para la segunda vuelta. Los votantes se enfrentarán a una elección entre dos candidatos opositores sin la influencia directa del expresidente, cuyo movimiento quedó fuera de la contienda electoral.