Santa Cruz registra dos secuestros y siete ejecuciones en poco más de un mes
Las investigaciones apuntan a actos del crimen organizado transnacional. Los hechos, ocurridos entre el 26 de julio y el 4 de septiembre, incluyen desapariciones y homicidios con un modus operandi similar. Las autoridades continúan con las indagaciones para esclarecer los casos.
Una escalada de violencia organizada
En algo más de un mes, Santa Cruz registró al menos dos secuestros y siete ejecuciones, revelando la presencia de crimen organizado con presunta participación de ciudadanos extranjeros y vinculados al narcotráfico. El abogado Cristian Sánchez consideró que «hay presencia del crimen organizado transnacional que se está disputando una plaza sudamericana», agregando que «Santa Cruz es un centro de acopio de distribución, de consolidación de negocios, fundamentalmente narcotráfico en Sudamérica con vinculaciones a Europa».
Secuestros y ejecuciones
La seguidilla de hechos delictivos comenzó el 26 de julio con el secuestro de José Carlos Dorado. El 29 de julio, Erick Roberto Baeza Achá fue secuestrado bajo el mismo modus operandi. El 12 de agosto, se hallaron tres extranjeros (serbios y macedonio) acribillados. El 22 de agosto, fueron asesinados Harold Méndez y Leonardo Vaca Diez. El 3 de septiembre, un joven vendedor de empanadas fue acribillado. El 4 de septiembre, se presumió la ejecución de Lorgio Saucedo Méndez.
Operativo en Warnes
Las investigaciones llevaron a la Policía hasta un hangar en Warnes, donde se encontraron extranjeros (con acento venezolano) fuertemente armados. Las autoridades retornaron al lugar con refuerzos, encontraron las armas de grueso calibre abandonadas, caletas subterráneas y avionetas, que presumen está relacionado con el tráfico de drogas.
Un contexto de disputa criminal
Según el análisis presente en el texto, Santa Cruz es percibida por grupos de crimen organizado como un centro de acopio y distribución clave para el narcotráfico en Sudamérica, con vinculaciones a Europa. Esta disputa por el control de la plaza criminal estaría detrás de la ola de violencia.
La ciudadanía ante la incertidumbre
La eficacia de la lucha contra estas organizaciones se ve cuestionada por declaraciones que señalan que «la lucha contra el narcotráfico está a ciegas, uno porque están envilecida por la corrupción». El impacto para el ciudadano es una mayor sensación de inseguridad y la exposición a hechos de violencia extrema, mientras las autoridades continúan con las investigaciones para esclarecer los casos.