Fábricas de EE.UU. planean en grande pero producen poco en agosto
El Índice de Optimismo Económico IBD/TIPP cayó a su punto más bajo del año, 48.7. Los datos de agosto muestran una brecha entre la ambición empresarial y la realidad económica. La confianza del consumidor se desplomó mientras el gasto se mantiene.
Una brecha de expectativas económicas
Los datos económicos de EE.UU. del martes cuentan una historia clara: las empresas enfrentan una brecha entre la ambición y la realidad. El PMI Manufacturero de S&P Global alcanzó 53.0 en agosto, lo que señala una expansión, pero el más confiable PMI Manufacturero del ISM se mantuvo en 48.7, marcando seis meses consecutivos de contracción.
La desconexión en la manufactura
Los pedidos nuevos de fábrica subieron a 51.4, la mejor lectura en meses, sin embargo, las fábricas aún dudan en contratar, con el empleo estancado en 43.8. Este patrón comenzó a finales de agosto cuando las encuestas empresariales mostraron la mayor confianza fabril desde 2022 y planes para nuevo equipo y plantas. Pero los datos duros contaron una historia más lenta: los pedidos de bienes duraderos cayeron un 2.8% en julio.
El consumidor, clave en la resiliencia
Los consumidores siguen gastando—el consumo personal subió un 0.5% en julio—pero se sienten inquietos. El Índice de Confianza del Consumidor de la Universidad de Michigan cayó a 58.2, con los hogares esperando una inflación de casi un 5% por delante.
Señales de tensión en el empleo
Los mercados laborales se mantuvieron estables, con solicitudes semanales de desempleo alrededor de 229.000, pero 1.95 millones de personas permanecieron en beneficios continuos, y la creación de empleo promedió solo 35.000 por mes en los últimos tres meses.
Un contexto de incertidumbre persistente
La Reserva Federal parece preparada para recortar las tasas de interés este mes, equilibrando una inflación por encima del objetivo del 2.9% y signos de tensión en el mercado laboral. El conflicto político entre la Casa Blanca y el liderazgo de la Fed añade incertidumbre sobre una política consistente. El déficit comercial de bienes de EE.UU. se amplió a 103.600 millones de dólares.
Entre la ambición y la realidad
La historia real es la creciente división entre las expectativas y los resultados. Las fábricas se preparan para el crecimiento pero no lo concretan. Los consumidores sostienen la economía mediante el gasto pero pierden confianza en el mañana. Las empresas retrasan inversiones mayores mientras esperan señales económicas y políticas más claras.
Navegando entre pronósticos y realidades
La economía de EE.UU. permanece resiliente a través de los servicios y la demanda de los hogares, pero la recuperación manufacturera sigue siendo frágil. Las empresas globales deben esperar una volatilidad continuada mientras la economía más grande del mundo navega entre ambiciosos pronósticos y realidades más duras.