Trump planea desplazar a la población de Gaza para crear centro turístico
El plan propone reubicar «voluntariamente» a dos millones de palestinos. Gaza quedaría bajo control estadounidense una década para su transformación. Fue revelado por el Washington Post tras una cumbre en la Casa Blanca sin palestinos.
Un fideicomiso para la transformación total
El proyecto de 38 páginas, desarrollado por la Fundación Humanitaria de Gaza (FGH), contempla la reubicación voluntaria de los aproximadamente dos millones de residentes de Gaza en otros países o en zonas seguras durante la reconstrucción. Quienes acepten irse recibirán 5.000 dólares en efectivo, además de asistencia para cuatro años de alquiler y un año de alimentos.
Ciudades inteligentes y tokens digitales
A los propietarios de tierras se les ofrecerán ‘tokens digitales’ para financiar una nueva vida en otro lugar o canjearlos por un departamento en una de las seis u ocho nuevas ‘ciudades inteligentes impulsadas por Inteligencia Artificial (IA)’ que se construirán en Gaza. El territorio sería administrado durante diez años por el Fideicomiso para la Reconstitución, Aceleración y Transformación Económica de Gaza (GREAT Trust).
Rechazo inmediato y apoyo
Hamas descartó cualquier plan en ese sentido. Un miembro de su oficina política, Bassem Naim, declaró que ‘Gaza no está en venta’ y que el territorio es «una parte integral de la gran patria palestina». Otro responsable del grupo, bajo anonimato, dijo que rechazan «todos estos planes que desplazan a nuestro pueblo». En cambio, el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, expresó su respaldo a un proyecto similar anunciado en febrero por Trump.
La voz de los gazatíes
Para Qasem Habib, un palestino de 37 años que vive en una carpa en Gaza, la propuesta es «un disparate». Wael Azzam, de 60 años, la calificó de «plan fallido» sin conocerla. Ahmed al Akkawi, de 30 años, dijo que la apoyaría si con eso terminaban los combates y les trasladaran a países europeos.
Un plan con antecedentes controvertidos
En febrero, Trump planteó que Estados Unidos se hiciera cargo de Gaza para convertirla en la ‘Riviera de Oriente Medio’, una vez despojada de sus habitantes. Aplaudido por la extrema derecha israelí, ese plan fue rechazado por los países árabes y la mayoría de los países occidentales, y la ONU advirtió sobre una ‘limpieza étnica’ en Gaza. La Fundación Humanitaria de Gaza (FGH) ha sido objeto de numerosas críticas por haber dejado un reguero de muertos entre gazatíes que se acercaban a buscar comida.
Un futuro incierto para la Franja
La viabilidad del plan depende de la aceptación de la población gazatí y del apoyo internacional, que hasta ahora ha sido mayoritariamente negativo. La propuesta, que surge en un contexto de guerra prolongada, plantea una solución radical que choca frontalmente con la posición de los actores principales en el terreno.