Mujeres alcanzan mayoría inédita en la Asamblea Legislativa boliviana
El 52.4% de los escaños legislativos serán ocupados por mujeres. Este dato, calificado como inédito, fue reportado por la Coordinadora de la Mujer tras los comicios del 17 de agosto. La nueva Asamblea será posesionada el próximo 8 de noviembre.
Un Legislativo con rostro de mujer
La nueva configuración de la Asamblea Legislativa Plurinacional “marca un avance significativo en la participación política de las mujeres en Bolivia”, según un boletín de la Coordinadora de la Mujer, el Movimiento Juntas Hacemos Historia y la Red Observa Bolivia. En el Senado, las mujeres ocuparán 21 de los 36 escaños (58.3%), mientras que en la Cámara de Diputados serán 66 de 130 (50.7%). Esta mayoría femenina consolida una tendencia al alza y posiciona a Bolivia entre los países con mayor representación de mujeres en su legislatura.
Detrás de la cifra récord
Pese al avance general, las organizaciones advierten que “persisten desafíos estructurales” en ciertos espacios. Se identificó una brecha de género en los escaños especiales indígenas, con solo un 14.2% de diputadas electas, y en los espacios supraestatales, donde seis de los siete escaños fueron ganados por hombres. Este desequilibrio se atribuye a la “permisividad” para presentar listados incompletos que afectó la paridad. No obstante, se destacó un hito en las diputaciones uninominales, donde por primera vez las candidatas titulares electas superan el 50%.
Un camino de avances graduales
La paridad de género rige en Bolivia desde hace años, pero su obligatoriedad se ha cumplido principalmente en el Legislativo. En 2020, la presencia femenina en el Senado alcanzó el 56%, rompiendo la preeminencia masculina que se mantenía desde 1982. La nueva asamblea no solo mantiene esa tendencia, sino que la refuerza. Recientemente, el Tribunal Constitucional anunció un fallo que establece la paridad obligatoria en los binomios presidenciales a partir de las elecciones de 2030.
El reto de transformar la cifra en realidad
La directora de la Coordinadora de la Mujer, Tania Sánchez, sostuvo que el nuevo escenario “impone el reto de acompañar, fortalecer y exigir el compromiso político” de los nuevos legisladores para que la igualdad no sea solo una cifra. La repercusión para el ciudadano radica en que esta representación sin precedentes podría influir en la agenda legislativa nacional, aunque su impacto concreto dependerá del trabajo y las alianzas que se construyan dentro de la nueva Asamblea.