Inversión y servicios resilientes compensan desaceleración de vivienda en EE. UU.
La economía estadounidense supera las expectativas con un crecimiento del 2.2%. Los datos de julio muestran una desaceleración en la manufactura y la vivienda, pero son compensados por una fuerte inversión empresarial y gasto del consumidor. Los informes regionales de la Reserva Federal confirman esta tendencia.
Un panorama económico con dos velocidades
Los últimos datos del Departamento de Comercio y otras agencias revelan una economía que parece más débil en la superficie pero que rinde mejor de lo previsto. Los pedidos de bienes duraderos cayeron un 2.8% en julio, una caída menor al 3.8% esperado. Sin embargo, los pedidos centrales de bienes duraderos, que excluyen defensa y aeronaves, aumentaron un 1.1%, superando ampliamente el 0.2% previsto. Los pedidos de inversión empresarial también repuntaron, subiendo un 1.1%.
La vivienda frena, el consumidor resiste
El sector de la vivienda continúa suavizándose por la presión de las altas tasas hipotecarias. El índice de precios de vivienda de la FHFA cayó un 0.2%. No obstante, el consumidor se mantiene como una fuerza estabilizadora; las ventas de Redbook aumentaron un 6.5% interanual. El índice de confianza del Conference Board alcanzó 97.4, mostrando una resiliencia en la demanda incluso cuando el sentimiento se suaviza.
El sector servicios toma el relevo
Los informes de los Bancos de la Reserva Federal regionales subrayan la división entre la actividad fabril y los servicios. Mientras la manufactura en Richmond se contrajo, los servicios se expandieron con fuerza. El Banco de la Reserva Federal de Dallas reportó que los ingresos de servicios subieron a 8.6. El modelo GDPNow del Banco de la Reserva Federal de Atlanta mantuvo su estimación de crecimiento para el tercer trimestre cerca del 2.2%.
Un ciclo de crecimiento inesperadamente duradero
Tras estos números mixtos, el mensaje central es que la economía de EE. UU. sigue desafiando las predicciones de una debilidad más aguda. Los ciclos de manufactura siguen siendo difíciles y la vivienda se enfría, pero la inversión, los servicios y el gasto del consumidor continúan sorprendiendo al alza. El crecimiento es modesto, pero está resultando mucho más duradero de lo que muchos esperaban.
Implicaciones de una recuperación desigual
El desempeño económico sugiere una transición donde el sector servicios compensa las debilidades en manufactura y vivienda. La capacidad de la economía para mantener un crecimiento modesto, a pesar de los desafíos en sectores clave, indica una notable resistencia que impacta directamente en la confianza y el gasto de los ciudadanos.