Vocal del TSE propone prohibir encuestas para segunda vuelta

Gustavo Ávila planteará no autorizar sondeos por falta de credibilidad. La medida busca evitar un clima de inseguridad y desconfianza en el proceso electoral. El vocal anunció que la propuesta será debatida por la Sala Plena del Tribunal.

Un mecanismo deslegitimizado

El vocal del Tribunal Supremo Electoral (TSE), Gustavo Ávila, anunció que planteará a la Sala Plena no autorizar encuestas de preferencia electoral para la segunda vuelta. Ávila reconoció que, pese a ser un instrumento valioso, las encuestas “han perdido credibilidad en Bolivia debido a sus constantes errores”. Afirmó que “en cada proceso electoral las encuestas fallan, desprestigiando a este mecanismo”.

Medidas drásticas y cambio normativo

El vocal sostuvo que se requieren cambios normativos y sanciones más severas contra las empresas encuestadoras. Explicó que la suspensión regiría “hasta no tener la seguridad de que esas encuestas hagan un buen trabajo”. Admitió que el TSE debe asumir decisiones más drásticas al respecto.

El desafío de las redes sociales

En relación con la difusión de contenidos en redes sociales, Ávila recordó que este es un problema global. Informó que el TSE trabaja en alianza con Chequea Bolivia y Bolivia Verifica para enfrentar la desinformación. Anunció una reunión urgente con la Unión de Organismos Electorales de Latinoamérica para coordinar acciones, subrayando que “hay que cambiar la norma, hay que actualizarla” ya que la actual “no habla nada de redes sociales y tiene hace más de 15 años”.

Un sistema electoral en revisión

El vocal del TSE reconoció que existe una normativa interna para el registro de encuestadoras, pero que esta ha resultado insuficiente. La constante falla en los sondeos de preferencia electoral ha llevado a que se cuestione públicamente su utilidad y confiabilidad en el país.

Hacia una normativa actualizada

La eficacia del proceso electoral futuro dependerá de la actualización de la normativa. El vocal expresó su expectativa de que los nuevos parlamentarios prioricen la modificación de la Ley de Régimen Electoral para fortalecer los procesos democráticos, abordando tanto el tema de las encuestadoras como el de la desinformación en redes sociales.