Justicia dispone revisión de plazos procesales de Áñez, Camacho y Pumari
Un tribunal resolvió que el juicio a la expresidenta Jeanine Áñez por el caso Senkata debe ser de responsabilidades. La decisión judicial, tomada este lunes, también incluye una revisión de la detención preventiva del gobernador Luis Fernando Camacho y del exlíder cívico Marco Pumari.
Un respiro judicial
La Justicia boliviana ha emitido fallos significativos en los procesos contra figuras políticas opositoras. Se dispuso el mandamiento de libertad para la expresidenta Jeanine Áñez en el caso Senkata, anulando el juicio ordinario y determinando que corresponde un juicio de responsabilidades. Paralelamente, se celebró una audiencia de revisión de plazos de la detención preventiva de Luis Fernando Camacho y Marco Pumari, la cual se suspendió hasta el martes.
Reacción de un exfuncionario
Marcel Rivas, exdirector de Migración durante el Gobierno de Áñez, celebró las decisiones judiciales. Rivas, quien se define como «uno de los perseguidos políticos», afirmó: «Celebro que ya sea hora de que liberen, no solo a la expresidenta, a Camacho y Pumari, sino a más de 300 presos políticos». También señaló que la justicia no debe ser instrumentalizada para beneficiar a ningún grupo.
Antecedentes de un proceso prolongado
Marcel Rivas estuvo recluido por más de tres años como medida preventiva antes de conseguir detención domiciliaria. Su caso estaba vinculado a la presunta emisión «irregular» de 445 alertas migratorias entre noviembre de 2019 y noviembre de 2020. Estas detenciones prolongadas se enmarcan en una serie de procesos judiciales iniciados tras la finalización del Gobierno de Áñez.
Un paso en el proceso judicial
Las resoluciones judiciales representan un cambio significativo en el desarrollo de estos procesos penales. La revisión de los plazos de la detención preventiva para Camacho y Pumari podría determinar su libertad, mientras que el caso de Áñez avanzará bajo una figura jurídica diferente. Estos hechos ocurren en un contexto político donde el Partido Demócrata Cristiano (PDC), facción de la que Rivas es vocero, avanza a una segunda vuelta electoral.