Diputado Aliaga insta a rearmar la política exterior boliviana
El parlamentario sugiere reorientar la diplomacia tras 20 años de «diplomacia de los pueblos». Afirma que las relaciones vecinales y hemisféricas se han debilitado. La declaración fue realizada a la red Erbol este lunes 25 de agosto.
Un nuevo rumbo para las relaciones internacionales
El diplomático y diputado paceño Gustavo Aliaga afirmó que el próximo gobierno electo en agosto debe rearmar el servicio exterior y poner una brújula a la relación hemisférica de Bolivia. Señaló que la gestión saliente ha debilitado las relaciones vecinales, priorizando vínculos con países como Rusia, China, Irán y Corea del Norte, mientras descuidaba su vinculación con América Latina y Estados Unidos.
Preocupación por las relaciones vecinales
Aliaga expresó su inquietud por la postura de Argentina, que considera a Bolivia un país “narcoterrorista” por el incremento de la producción de pasta base de cocaína. También calificó de “muy mala” la relación con Perú, cuyos gobernantes llamaron recientemente a Bolivia “país fallido”. Además, mencionó que el país se ha convertido en una ruta para la migración venezolana hacia naciones vecinas.
La situación con Estados Unidos y otros regímenes
Otra gran preocupación es la relación con Estados Unidos, actualmente fría y sin nombramiento de embajador durante 16 años, salvo un corto período. El diputado criticó la relación con Venezuela, Nicaragua y Cuba, donde, según dijo, se promovió un discurso de lucha contra el imperialismo.
Veinte años de un enfoque diplomático diferente
El contexto se enmarca en un período de 20 años de la llamada “diplomacia de los pueblos” implementada por el gobierno saliente. Este enfoque priorizó abiertamente vínculos con gobiernos alejados de la esfera de influencia occidental y reconoció al gobierno de Nicolás Maduro, lo que, según el diputado, minó la relación hemisférica.
El desafío del próximo gobierno
La principal implicación es que la próxima administración que asuma el poder tendrá el desafío de reconstruir y reorientar la política exterior boliviana. El objetivo será recomponer las relaciones con los países vecinos y hemisféricos, que se encuentran actualmente en un estado de debilitamiento según el análisis presentado.