Tuto Quiroga promete autonomía total y salvataje económico para Bolivia
El candidato presidencial anuncia una «avalancha legislativa» desde el 8 de noviembre. Su plan incluye un pacto de autonomías, un programa internacional de estabilización y medidas drásticas contra la violencia infantil. Propone reformas profundas para enfrentar la crisis actual.
Un plan para liberar a Bolivia
Jorge Tuto Quiroga, candidato por la alianza Libre, defiende su plan político, económico y social de cara a la segunda vuelta electoral. Afirma que Bolivia no puede esperar y promete reformas desde el primer día de su eventual gobierno. Su propuesta se centra en tres ejes principales: autonomía, estabilización económica y justicia.
La autonomía como eje central
Quiroga propone una descentralización vital. Hablamos de autonomía total: salud, educación y seguridad bajo responsabilidad regional y local. Con este modelo, el 62% del gasto sería para gobiernos subnacionales y el 38% para el nivel central. Además, plantea regalías verdes para las regiones a partir de los bonos de carbono.
El salvataje económico urgente
Para enfrentar la crisis económica, propone un programa internacional de estabilización con FMI, CAF, BID y FLAR. Aclara que no se trata de una devaluación, sino de devolver dólares, estabilizar precios, importar diésel y gasolina. Argumenta que este salvataje es un certificado de buena conducta que abre acceso a créditos baratos y permitirá salvar a universidades, alcaldías y gobernaciones.
Justicia independiente y seguridad
En materia judicial, promete designaciones por dos tercios de los mejores profesionales para cargos como fiscal general y Defensor del Pueblo. Afirma que en mi gobierno no habrá fiscales ni jueces obedeciendo órdenes políticas. Para combatir la violencia infantil, plantea endurecer penas, crear oficinas especializadas en Fiscalía y dar ejemplo desde la Presidencia.
Veinte años de espera
El candidato sitúa su propuesta en el contexto de 20 años de dominio del MAS, que hoy está desplomado en presencia parlamentaria. Esto, según él, obliga a construir consensos y abre un tiempo distinto para el país, sin hegemonías posibles.
El trabajo comienza inmediatamente
La eficacia de este plan dependerá de su ejecución tras la segunda vuelta. Quiroga se compromete a que, desde el 8 de noviembre, no habrá cócteles ni festejos, habrá trabajo inmediato para aprobar leyes clave y lanzar reformas profundas, en un intento por recuperar lo que califica como 20 años perdidos.