Trump anuncia despliegue armado de la Guardia Nacional en 19 estados
Casi 2000 efectivos ya patrullan armados en Washington D.C. El Pentágono confirmó la expansión de las operaciones para combatir el crimen violento y la inmigración ilegal. Chicago será la próxima ciudad en recibir refuerzos federales.
Un despliegue federal sin precedentes
El Presidente Donald Trump anunció desde el Despacho Oval que los esfuerzos federales de reducción de criminalidad, apoyados por la Guardia Nacional en Washington D.C., se expandirán pronto a otras ciudades. El Pentágono confirmó que los miembros de la Guardia en la capital patrullan ahora con armas de fuego y que los despliegues se ampliarán a 19 estados hasta mediados de noviembre.
Refuerzo masivo de efectivos
Casi 2000 efectivos de la Guardia Nacional ya están activos en Washington, según el Departamento de Defensa, y otros 1700 se movilizarán a nivel nacional en las próximas semanas. Funcionarios de Defensa describieron la decisión de armar al personal de la Guardia como “de sentido común”, haciendo hincapié en la seguridad pública. Se espera que Texas albergue el contingente más grande.
Las próximas ciudades objetivo
Trump declaró que la presencia de la Guardia en la capital había reducido la delincuencia y elogió la cooperación entre las tropas federales y la policía local. Afirmó que los residentes en Chicago querían una intervención más fuerte, citando su “insatisfacción con el liderazgo de la ciudad”. Calificó a Chicago como “un desastre” y prometió que las fuerzas federales restaurarían el orden allí, siendo la próxima en la lista, mientras que Nueva York está bajo consideración.
Expertos advierten sobre la eficacia a largo plazo
Los expertos advierten que, si bien los despliegues militares visibles a menudo crean un efecto disuasorio inmediato, no resuelven las causas profundas de la criminalidad a largo plazo. Jeff Wenninger, un teniente de policía retirado, explicó que las reducciones a corto plazo pueden desvanecerse una vez que las fuerzas se retiran, resurgiendo el crimen localmente o desplazándose a otro lugar.
El desafío de la coordinación
La coordinación multiagencial añade más complicaciones. Surgen preguntas sobre la autoridad, la formación y la cadena de mando cuando operan juntas fuerzas federales y locales. Los analistas señalan que sin una planificación precisa, las jurisdicciones superpuestas pueden reducir la efectividad.
Un enfoque en vecindarios específicos
La dinámica en Washington destaca estos desafíos. La ciudad tiene unos 700.000 residentes, pero el crimen violento se concentra en los Distritos 7 y 8, hogar de aproximadamente 73.000 personas. Los despliegues afectan principalmente a estos vecindarios, lo que genera preocupación de que sus residentes experimenten una vigilancia policial intensa, mientras que otros perciben solo beneficios indirectos.
Una estrategia con raíces en la seguridad pública
Estos despliegues están programados para reforzar las operaciones federales y locales contra el crimen violento y la inmigración ilegal. Los funcionarios subrayan que se deben lograr tanto la reducción del crimen como la mejora de la confianza pública en la seguridad.
Los resultados se verán con el tiempo
El Pentágono confirmó que las operaciones expandidas continuarán durante el otoño. Los analistas enfatizan que su efectividad solo se hará evidente después de que los datos criminales sean revisados a lo largo de varios meses. La pregunta clave es si la intervención federal proporciona mejoras de seguridad duraderas o simplemente desplaza los problemas hasta que las tropas se retiren.