UE y EE.UU. acuerdan tregua comercial con aranceles del 15%
Washington aplicará un arancel del 15% a la mayoría de bienes europeos. El marco, que evita una escalada de tarifas, incluye también compromisos de compra de energía y la reapertura de mercados agrícolas. Se anunció este 22 de agosto tras el acuerdo del pasado 27 de julio.
Un alto el fuego comercial sobre el papel
La Comisión Europea y el gobierno de EE.UU. publicaron una declaración conjunta que confirma el marco comercial acordado en Escocia. El texto establece una hoja de ruta para evitar una escalada arancelaria, aunque aún no tiene fuerza de ley. La relación comercial transatlántica está respaldada por más de 5 billones de dólares en inversión mutua.
Los detalles del acuerdo
Washington aplicará un arancel del 15% a la mayoría de bienes europeos a partir del 1 de septiembre de 2025. Una lista separada de productos recibirá el arancel de nación más favorecida, e incluye corcho, aeronaves y sus partes, medicamentos genéricos y precursores químicos. Los aranceles estadounidenses sobre el acero y el aluminio se mantienen en el 50%.
Condiciones para el sector automotor
El acuerdo mantiene presión sobre los fabricantes de automóviles europeos. Washington se comprometió a reducir el arancel a los coches del 27,5% al 15%, una vez que Bruselas elimine los aranceles a todos los bienes industriales estadounidenses. La Comisión Europea tiene la intención de presentar la legislación necesaria a finales de agosto.
Compromisos que van más allá de los aranceles
El marco se extiende más allá de las tarifas. Europa se comprometió a comprar unos 750.000 millones de dólares en suministros energéticos de EE.UU. para 2028, incluyendo gas natural licuado, petróleo y productos nucleares. Bruselas también se comprometió con al menos 40.000 millones de dólares en chips de inteligencia artificial y 600.000 millones en inversión en sectores estratégicos estadounidenses.
Acuerdos en agricultura y pesca
La Unión Europea acordó reabrir los mercados para la carne de cerdo, los lácteos, los frutos secos, los alimentos procesados, las semillas, el aceite de soja y ciertos mariscos estadounidenses. La declaración revive el acuerdo de la langosta de 2020, esta vez incluyendo langosta procesada, tras su expiración en julio de 2025.
De la confrontación a la competencia gestionada
Este acuerdo surge tras las amenazas de tasas arancelarias superiores al 30% y supone un cambio desde la confrontación hacia una competencia gestionada. El documento proporciona claridad para las empresas, pero mantiene abiertos importantes puntos de leverage. El marco pretende estabilizar la mayor relación comercial transatlántica.
Un futuro pendiente de legislación
El único cambio inmediato es la tarifa base del 15% que Washington ya aplicó. Todos los pasos adicionales dependen del seguimiento legislativo en ambas capitales. Los próximos meses probarán si los gobiernos pueden traducir la intención política en leyes vinculantes.