Trabajadores de salud de Santa Cruz inician paro indefinido por deudas
La atención hospitalaria se limita únicamente a emergencias. La medida, que cumple su tercer día, afecta a todos los niveles de hospitales. Los trabajadores exigen el pago de bonos y salarios adeudados por la Gobernación.
Un paro que paraliza la salud
El paro indefinido comenzó el 19 de agosto y obliga a los pacientes a reprogramar sus citas, interrumpiendo sus tratamientos y consultas médicas. El dirigente Robert Hurtado fue contundente al exigir a la Gobernación: «Es con depósito, no es con charlas». La protesta se mantendrá hasta que se cancele la deuda pendiente con el sector.
La respuesta de la Gobernación
Frente a las demandas, la Gobernación informó que ya consiguió el 80% de los recursos necesarios y gestiona el 20% restante. El secretario departamental de Salud, Marcelo Kramer, explicó que la institución atraviesa una situación compleja por falta de liquidez presupuestaria, atribuida a la disminución de ingresos por el Impuesto Directo a los Hidrocarburos (IDH).
Un acuerdo incumplido que desencadenó la protesta
Este conflicto no es nuevo. Un paro previo, iniciado el 28 de julio, fue interrumpido tras una reunión con el Comité Cívico pro Santa Cruz y la Defensoría del Pueblo. En dicha reunión, la Gobernación acordó realizar el pago a más tardar el lunes 18 de agosto. Al no cumplirse el acuerdo, los trabajadores reiniciaron la medida de fuerza.
Los pacientes, los más afectados
La repercusión para el ciudadano es directa y grave. Los más afectados son los pacientes con enfermedades crónicas como cáncer o lupus. Las áreas de emergencia se colapsan debido a la gran afluencia de personas que necesitan atención médica y que no pueden ser atendidas en las consultas regulares, las cuales están suspendidas.
Un sistema bajo presión financiera
El contexto de este conflicto se enmarca en la compleja situación por la falta de liquidez presupuestaria que atraviesa la Gobernación de Santa Cruz. Esta falta de recursos se debe específicamente a la disminución de los ingresos provenientes del Impuesto Directo a los Hidrocarburos (IDH), lo que limita su capacidad para cumplir con las obligaciones financieras con sus trabajadores.
La salud a la espera de un depósito
La normalización de los servicios de salud en Santa Cruz depende exclusivamente del cumplimiento del pago por parte de la Gobernación. La situación mantiene en vilo a miles de pacientes que ven sus tratamientos interrumpidos, mientras la institución busca los recursos restantes para saldar la deuda con los más de 10.000 trabajadores del sector.