Tres candidatos debaten mientras cinco ausentes generan críticas
Solo Eduardo Del Castillo, Pavel Aracena y Rodrigo Paz asistieron al debate organizado por el TSE. El evento, celebrado el 13 de agosto en El Alto, quedó marcado por las ausencias de cinco aspirantes presidenciales, quienes priorizaron sus cierres de campaña.
«A los caballeros de honor se les conoce cuando cumplen su palabra»
La vocal del TSE Nancy Gutiérrez abrió el debate recordando el compromiso democrático incumplido por los ausentes. Los presentes —Del Castillo (MAS), Aracena (ADN) y Paz (PDC)— interpelaron sin éxito a sus rivales, cuyas sillas vacías dominaron el escenario. «Buscan privatizar recursos», acusó Del Castillo, mientras Aracena defendió su referéndum para explotar litio.
Propuestas económicas en contraste
Del Castillo prometió atraer $12.000 millones en inversiones para agro y minería, mientras Aracena propuso inyectar $6.000 millones con venta parcial de litio. Paz, en cambio, abogó por una «renta directa» de utilidades de recursos naturales a ciudadanos. Las diferencias también surgieron en reformas: reducción de ministerios (MAS), nueva asamblea constituyente (ADN) y descentralización presupuestaria (PDC).
Un debate con más sombras que luces
El TSE reconoció que la ausencia de cinco candidatos limitó el pluralismo. Andrónico Rodríguez, Samuel Doria Medina, Tuto Quiroga, Manfred Reyes Villa y Jhonny Fernández optaron por actos proselitistas en La Paz y Santa Cruz, pese a haber exigido previamente este espacio.
Debates en riesgo de extinción
La normativa electoral no obliga a los candidatos a participar en debates, una práctica que había desaparecido en los últimos años. El TSE plantea una ley para garantizar su realización futura, aunque la deserción masiva en este evento refleja la polarización y prioridades de campaña a cuatro días de las elecciones.
La democracia se juega también en las ausencias
El evento dejó en evidencia la fractura en el ejercicio democrático boliviano, donde la confrontación superó al diálogo. Las propuestas económicas de los tres candidatos presentes chocaron con un escenario incompleto, mientras los votantes quedaron sin respuestas de quienes lideran las encuestas.