Bolivia celebra Bicentenario en medio de crisis económica e institucional
El país conmemora 200 años de independencia con polarización política y expectativas en las elecciones del 17 de agosto. Analistas destacan la debilidad institucional y la ausencia de líderes internacionales en los actos protocolares. La celebración se centró en Sucre con baja representación diplomática.
«Una esperanza tímida en las urnas»
El analista político Ludwing Valverde señaló que las elecciones presidenciales del 17 de agosto son vistas como una oportunidad para resolver conflictos internos. «Hubiésemos querido conmemorar estos 200 años con un país unido y en buena situación económica, pero no es el caso», afirmó. La crisis económica y la polarización social marcan el ambiente.
Ausencia diplomática y tensiones internas
Los actos en Sucre contaron solo con la presencia de la presidenta de Honduras, Xiomara Castro, y la vicepresidenta de Ecuador, Verónica Abad. El resto de delegaciones estuvieron representadas por diplomáticos, reflejando el aislamiento político del país. Además, se evidenciaron tensiones entre los órganos del Estado durante las ceremonias.
Críticas al modelo del Estado Plurinacional
Germán Gutiérrez, otro analista consultado, atribuyó la crisis institucional a los 20 años de gobierno del MAS. «La república ha sido golpeada y reemplazada por un Estado Plurinacional que debilitó sus principios», sostuvo. Propuso «reivindicar una república moderna que restaure la institucionalidad», en alusión a la próxima etapa política.
Dos siglos entre luces y sombras
El Bicentenario llega en un contexto de desaceleración económica, conflictos políticos internos en el partido gobernante y cuestionamientos a la independencia de poderes. El modelo del Estado Plurinacional, impulsado desde 2006, enfrenta críticas por su manejo institucional.
El futuro se decide en las urnas
Las elecciones presidenciales de agosto marcarán el rumbo post-Bicentenario. Los analistas coinciden en que el desafío inmediato es recuperar la estabilidad institucional y económica, aunque sin consenso sobre cómo lograrlo. La ciudadanía espera respuestas a la crisis actual.